La mamá de un niño de 18 meses está tirada en el suelo, de esos que son como de corcho, dándole de mamar. Se acerca una niña de 5 años:
-¿Eres su mamá o su tía?
-Soy su mamá
-¿Y por qué le das la teta?
-Porque es un bebé y los bebés toman teta (la mamá sonríe)
-¿Y no toma biberón?
-No, no toma biberón, es un privilegiao (la mamá vuelve a sonreír)
(... un momento de silencio...)
-Ah! Porque le gusta. Le gusta ir sin zapatos ¿a ti no te gusta andar sin zapatos?
-Se va a poner malito
-No, no se va a poner malito
-¿Por qué no?
-Porque no pasa nada por andar sin zapatos
-Mi mamá dice que si ando sin zapatos me pongo malita
(...silencio, toca pensar la respuesta)
-Pues pregúntale entonces a tu mamá por qué.
(...nuevo silencio...)
El bebé suelta la teta y ríe. Se pone de pie y va hacia la niña. Ve que tiene una blusa corta, y dice "ombigo". La niña se baja la blusa y guarda el ombligo. -Quiere que le enseñes el ombligo.A ver, enséñale tú el tuyo. Él se levanta su camisa y repite "ombigo". Ríe a carcajadas. La niña se aleja.
-Mira lo que sé hacer, dice cambiando de tema.
Y la niña preciosa, vestida de princesa, se pone a dar vueltas y vueltas colgada bocaabajo del columpio.