Los últimos acontecimientos en París, han desencadenado lo que podemos llamar ya una guerra abierta entre en el mundo entre Estado Islámico y Francia. Un país símbolo de la igualdad, la fraternidad y la libertad es atacado por un grupo terrorista, con la intención de imponer ¿sus directrices?, ¿difundir el Islam?, parece que cualquier excusa es buena para matar, y siempre lo pagan aquellos que se encuentran en un fuego cruzado. Y es, aunque algunos crean que no, la religión también se puede vivir de una forma pacífica.
Resulta difícil opinar sobre el tema, sin caer en cierto oportunismo, ya que es un tema que está en la mente de la gran mayoría de la humanidad. Pero está claro que es un “episodio” que estará grabado en la historia de la Humanidad. Conociendo cosas del pasado entenderemos un poco mejor este enfrentamiento, y seremos testigos de unos acontecimientos en tiempos difíciles. Y somos capaces de informar y opinar sobre el tema, sin que las dos acciones sean diferentes.
Estamos en un contexto de guerra, donde vemos que la “paz” que hemos gozado en Europa está siendo amenazada directamente. Los atentados de París son altamente condenables, porque atacan a nuestro medio de vida. No obstante, las comparaciones siempre suelen ser odiosas. ¿Por qué se le da más importancia a las víctimas de Francia que a los de otro país? ¿Empatía?, ¿cercanía? Aunque afortunadamente hay gente que no hace distinciones, y entiende que la violencia no distingue de país, de ideología ni de genero. El Estado Islámico genera un problema en el mismo territorio que domina, y genera una destrucción allí, que difícilmente las generaciones venideras puedan reconstruir. También creando un grueso de refugiados que desgraciadamente no encontrarán su lugar en el mundo (solo algunas excepciones).
Un mundo en guerra, del que también resulta interesante fijarse en el papel que juegan los diferentes estados implicados, a parte de los ya nombrados.
Recordemos que tras la devastadora II Guerra Mundial, se iniciaron los mecanismos para establecer un status quo de cierta paz, para evitar otra vez los sucedidos. ONU, OTAN y otras organizaciones que agilizaban en cierta medida todas esas relaciones diplomáticas, y marcaban una serie de normas, con menor o mayor dificultad. Veremos, o no, como llegan a un consenso Estados Unidos, la Unión Europea y Rusia, teniendo intereses encontrados en esa zona (y en otras).
Un tema complicado, con mucha información a tener en cuenta. No solo por los acontecimientos que se producen, y los que tendrán lugar, sino que también ver las diferentes reacciones de las personas respecto a tema.
Dicho esto, cierro esta entrada con la imagen de “La libertad guiando al pueblo” de Delacroix, no solo por ser un símbolo francés, sino que también refleja una situación que se vuelve a repetir: una lucha por la libertad, y de las contradicciones que genera.
Os animo a todos a la reflexión, sobre todo desde un punto de vista histórico.
PaullusHistoricus