Porque creo que los congresos civiles, y mas cuando es de un partido democrático, no es un conclave religioso me atrevo a opinar, sobretodo en el convencimiento que, el discrepar, lejos de dividir revitaliza.
No hace mucho decía que a los delegados se les había dado un protagonismo histórico, el de empezar a convertir un partido con estructuras de siglos pasados en estructuras mas acordes con los tiempos actuales, mucha responsabilidad sin duda. Y pasó lo que pasó, después de plenarios, plenarios, a tope para elegir secretario general, es decir, repartir cargos, cuando llega la hora de,discutir y tomar decisiones de congreso como es la democratización en la elección de los Secretarios Generales, del plenario desaparecen 500 delegados, fuerte ¿Que no?
Al final 400 personas deciden por 200.000 militantes, que no, que seguimos prefiriendo que el secretario general sea fruto de negociaciones de mesas camillas o de habitaciones de hotel y no de la decisión directa de tod@s.
Y cabe preguntarse, no sin mucho desasosiego,¿ donde estaban los 500 delegados abstencionistas?, posiblemente en el mismo sitio que los delgados gaditanos cuando en Cadiz se discutieron las enmiendas organizativas. Sin duda, como dice un amigo catalán, esto habría que hacerselo mirar.
Por cierto, una voz casi celestial, ha llegado hablar de sometimientos, es una opción, yo respeto casi todo, pero a mi el cuero y el látigo que es a lo que me suena eso de,someterse, a mi como que no.
Y ahora toca la confección de las listas en Cadiz, lo lógico seria la confección de la lista se realizara por medio del voto directo por parte de, al menos, toda la militancia. Lo lógico, pensar que ni Pizarro, ni Menacho son referentes hoy de la ciudadania progresista de la Provincia gaditana, que no se trata de cocinar listas en cocinas para asegurarse cuotas de poder o pensiones, que así se pierde seguro.
Pero bueno, no soy demasiado optimista. Por cierto, y como acto casi de fe para que no se diga, mi secretario general Alfredo, mi candidato a presidir la Junta Pepe Griñan.