No fueron solamente los hindúes, quienes escribieron , libros e ilustraron páginas dedicadas a los placeres de la carne y sus triquiñuelas, de hecho los egipcios fueron un pueblo estrechamente ligado a su sexualidad y aunque sus representaciones y referencias no eran tan directas como las de los liberales romanos y los lujuriosos griegos, el sexo como elemento generador de vida está presente en muchas manifestaciones de esta cultura, incluso en sus tumbas.
El sexo entre los muertos:
Las imágenes en las tumbas egipcias poseen dos niveles de lectura, uno nominal, donde las escenas son puramente lo que vemos y otro subliminal donde el vinculo con temas sexuales es irrompible. Los egipcios creían fervientemente en la capacidad de engendrar vida en el más allá, por lo que todas las escenas en sus tumbas se relacionan con el sexo, aunque a simple vista no lo parezca. Incluso las escenas donde aparecen animales, tenían un simbolismo que iba más allá de ilustrar las mascotas que serían la compañía del difunto en el reino de los muertos. Por ejemplo los monos verdes, muchas veces representados, era interpretados como símbolos eróticos y los gatos, muchas veces dibujados bajo los asientos de sus damas, revelaban que la mujer estaba lista para recibir en su interior la semilla de la vida. Hasta las escenas donde se observan hermosas sirvientas vertiendo líquidos en las copas de sus amos o señoras sirviendo a sus maridos indicaban un contenido sexual, pues para ellos, el verbo "verter" poseía un estructura idéntica a "eyacular".
Estos mensajes subliminales eran la forma sutil de mostrar la sexualidad en los círculos de las cortes faraónicas, pero no fueron el único método utilizado por los egipcios para referirse a tan importantes cuestiones.
De ostracas y versos:
Los escribas y artesanos menos influyentes, empleaban lajas de piedras o fragmentos de cerámica como soporte alternativo al papiro que era demasiado costoso, y en ellos realizaron esbozos y apuntes varios que dejaron saber a las civilizaciones posteriores detalles de las costumbres que mantenían a puerta cerrada, por ejemplo así se conoce que era altamente habitual que el hombre fuese quien se colocara, dominantemente encima de la mujer para el coito. Sin embargo también se han hallado ostracas que muestran a parejas practicando la penetración posterior, método que resultaba útil pues anulaba la posibilidad de embarazos no deseados y aunque el sexo prematrimonial no estaba mal visto los egipcios consideraban conveniente mantener las formas y evitar percances.
Los poemas amorosos de la época, muestran sorprendentemente como no son nada diferentes los gustos de los antiguos, a los nuestros en el liberal y "open minded" siglo XXI. Algunos de los poemas egipcios datan del siglo 1200- 1150 a.c. y hablan sobre deseos de sumisión, de actitudes masoquistas o posturas dominantes. En la propia de historia de Isis y Osiris se narra un acoplamiento zoofílico y en otros textos se cuenta del atípico sumario de un juicio, donde un grupo de mujeres intentó comprar a los jueces organizando varias orgías para ellos y en estos textos es muchas veces la mujer quien toma la iniciativa
Ni siquiera la masturbación estaba mal vista entre este sofisticado pueblo, ¿ cómo podría estarlo, cuando la propia historia de su creación narra como el dios Atum creó a los dos primeros dioses de su esperma luego de auto complacerse?. Los discretos egipcios practicaba habituales orgías, en las que participaban altos miembros de la corte, sacerdotes y alto cargos, que han quedado ilustrados en documentos como "El papiro de Turín", donde se representa el acto de manera natural y sin tapujos.
La poligamia era ampliamente permitida también, respetando siempre la figura de la esposa en el entorno familiar y existían prostitutas que dominaban las artes de la danza y el erotismo, mientras que otras se especializaban en felaciones y se diferenciaban de las primeras, pintando sus labios de colores intensos.
En fin los reservados integrantes de esta civilización tuvieron una colorida y muy completa relación con la sexualidad, favoreciendo al goce y al cuerpo sin tantos prejuicios, tanto así que a ellos se les atribuye la creación del primer consolador de la historia. 😉