En lugar de cena y grito el 15, lo que debería hacer el presidente es pedir un minuto de silencio

Publicado el 10 septiembre 2010 por Gmobuelna

Por ningún motivo apruebo en lo personal que se gasten cerca de 2 millones de pesos en la compra de una vajilla conmemorativa para la cena del presidente este 15 de septiembre, principalmente porque esa noche habrá muchos millones de mexicanos que se van a ir a la cama sin una cena decente o lo que es peor, sin cenar.

Cuando supe hace uno o dos años que la presidencia de la república tenía considerado gastar una fortuna -miles de millones de pesos- para celebrar la fecha del bicentenario señalé que solo los locos y los pendejos hacen fiestas en sus casas en medio de crisis económicas, si bien, hoy no estamos como el año pasado, ya la economía creció en el último trimestre, sigue siendo una ofensa al ciudadano mexicano que se tire el dinero de esta forma, cuando la mayoría de la población batalla para completar el gasto.

Tenemos al PRI con un pie en Los Pinos en este momento, nos pasamos décadas soñando el día que los expulsaríamos de la casa presidencial y nos bastaron 10 años de gobierno del PAN, que si bien es cierto hay transparencia en el gasto, no hay los abusos en la medida que se daban con el PRI, se observa al final que no han sabido gobernar al país, se vieron sosos, lentos, inexpertos, sin oficio político y sin la capacidad de hacer equipos. Claro, las cosas habían llegado a un desgaste muy fuerte con el PRI, las instituciones rebosaban corrupción, pero al PAN le hicieron falta unos toques maestros de inicio de sexenio, como fue el quinazo en la era de Salinas o algo por el estilo, eso hubiera aquietado a los demonios políticos, y el golpe ejemplar hubiera sido la guerra contra la corrupción, no contra el Narco, esta era la segunda guerra, pero solo después de ganar o al menos avanzar en la primera.

Por último, no solo estoy en contra de la compra de esta inútil vajilla como lo señalé en el primer párrafo de este post, estoy en contra del gasto en esta pendeja celebración y sobre la cena del 15 de septiembre del presidente, pienso que no se la ha ganado, debería esa noche pedir perdón al pueblo de México, y después un minuto de silencio para celebrar los 200 años de corrupción en nuestro país, pero al parecer o el moreliano nació sin huevos, o nunca aprendió a usarlos.