Por eso vengo a Ti oh Madre; porque dentro de mi camina un niño inseguro. Porque quiero como vos aprender a mirar con los ojos del amor… a meditar y guardar todo en el corazón… A saber comprender que todo es para algo, pues Dios tiene un plan para cada uno y que yo tengo que esforzarme en descubrir, aceptar y recorrer ese valle que tu Hijo ha trazado para mi. Ven Madre visítame y haz que yo sea siempre testimonio de esperanza para muchos que se encuentran en medio de la oscuridad, que sea siempre generoso y asi como recibí todo de ustedes; siempre esté dispuesto a dar… Y dar hasta que duela!…
Madre que pueda renovar diariamente mi consagración a Ti, recordando que Dios me da la gracia por tu amorosa intersección de recorrer el camino, que Dios es misericordia porque aunque caiga Él me levanta, Dios es la fuerza porque en Él he puesto mi confianza y se que no me defraudará.
Por eso visítame Señora,
Renuévame por completo para que consiga ver lo hermoso de la vida. Si me ves en la tentación socórreme para que pueda proseguir el viaje y así caminar sin miedo. Dame tu mano y no permitas que me separe de Ti. Dame tu bendición, para que mi presencia sea, en medio del mundo un signo de tú bendición.
Amén.