Soy mujer, madre, trabajadora,
cocinera, economista, educadora,
…… y en consecuencia equilibrista.
Porque no me negaréis que para compaginar tantas facetas hace falta equilibrio
y grandes dosis de paciencia y cordura, ambas a partes iguales.
Y en una de esas semanas duras de narices,
donde quisieras añadir horas al reloj, donde no llegas, donde no hay ayuda
posible, donde piensas que la conciliación
es un cuento chino que algunos se inventaron para que las mujeres carguemos con
todo… Un día de esa semana donde la cordura te abandona por momentos piensas: En
otra vida quisiera ser….. Sigue leyendo