En pocas palabras os voy a contar por qué os recomiendo encarecidamente estos dos encantadores títulos. Esta vez nos embarcaremos en la muchas veces gratificante lectura de la autoayuda y de los pequeños empujoncitos que una lectura sencilla que nos puede dar en un momento de franca necesidad. Además, aprovechamos para presentaros la colección de Comanegra, "Crecimiento personal", que guarda los dos títulos de los que hoy vengo hablar.
Comanegra, rústica, 13x18cm, 99pp, 14,50 €
La ley de espejo, de Yoshinori Noguchi, empieza con una premisa algo engañosa. Eiko Akiyama está preocupada porque se ha dado cuenta de que su hijo sufre Ijime (el sonado bullying japonés) y esto la hace sentir impotente, atrapada, sin saber qué hacer ante el problema que le presenta su hijo. Pero aquí es cuando viene el giro que en su momento me descolocó (pues yo esperaba un relato sobre el acoso escolar y como enfrentaba esto la familia): el marido de Eiko y padre de Yuta (el niño maltratado), le habla a Eiko de Yaguchi, un hombre que la ayudará a ella con la preocupación que lleva encima.
Aquí es cuando realmente empieza el relato y nos sumergimos en la psicología compleja de Eiko, en sus problemas, en sus pensamientos y hasta en sus rencores; las cosas que no puede olvidar y las cosas que podrían ayudarla a superar sus problemas y de esa manera estar más despejada parar poder ayudar a su hijo. Y es que si Eiko tiene problemas que no puede resolver y que la martirizan aun sin ella saberlo, ¿cómo podría ayudar a su hijo? La ley del espejo nos demuestra de una forma elegantemente sencilla como cada acto tiene una consecuencia y como éste puede afectarnos profundamente. Nos enseña también cómo una charla a tiempo puede arreglar muchos problemas y ayudarnos a avanzar de la forma más adecuada. Un gracias, un lo siento o un te quiero en el momento apropiado nos puede ayudar a llevar una vida más sencilla, tranquila y plena y, si logramos esto, los problemas nos parecerán más fáciles y tendremos mejor disposición para resolverlos de la mejor forma posible.
Es por eso que La ley del espejo es un pequeño libro que vale la pena tener en casa, maravillosamente relatado, sin florituras y que va directamente al grano, es de esos libritos pequeños que vienen muy bien leer cuando te sientes confundido y no sabes qué rumbo tomar para que tu vida sea más sincera y plena.
Comanegra, rústica, 18,2x13cm, 104pp, 14,50 €
¿Qué te pasaría si toda esa vida que ya tienes asentada y trabajada, en la que te has acomodado durante todos estos años, se viene abajo de la forma más inesperada?
Máire siente que lo tiene todo. Está profundamente enamorada de Liam, su marido y está pensando seriamente en darle una sorpresa, un viaje a ese lugar que tanto desea Liam. Está ansiosa por decírselo, pero ese mismo día Liam le confiesa algo que cambiará sus vidas para siempre: se ha enamorado de otra mujer. Y a partir de ese mismo momento, Maire tendrá que dar un giro a su vida iniciando un viaje en el que espera cerrar las viejas y nuevas heridas y aliviar su dolor.
Este pequeño libro tiene un comienzo desgarrador y maravilloso, no mentiré al deciros que hasta lloré. Los sentimientos y los diálogos entre la pareja se sienten tan reales… Desde el principio se puede apreciar la maestría de Eva Mengual para relatar como una pareja se desquebraja desde los cimientos. No existe ni una sola escena cliché o mal llevada, sino que se nos muestra una reacción que se palpa realista y verosímil. Asistiremos como público a la despedida de una pareja que no tiene nada que reclamarse, solo el hecho de que uno de ellos se haya enamorado de otra persona y que eso no significa que el amor de esa persona haya muerto, sino que solo ha cambiado. Inmediatamente después, en el relato comienza la segunda parte, la del viaje de Máire que, sin saber dónde ir, que sabe a dónde no quiere llegar. Y es ahí cuando conoce a Cian, quien consigue darle fuerzas y ánimos para seguir con ese viaje de redescubrimiento personal, aprendiendo también que hay diferentes clases de amor, sí, pero que ese amor desaparece cuando dejamos de amarnos a nosotros mismos.
“El camino del amor” es un precioso relato sobre descubrimiento personal, que nos hace reflexionar y llorar, reencontrarnos con algunas partes de nosotros mismos que se niegan a salir a la superficie. Sin embargo, he de confesar que me decepcionó un poco cuando Máire comienza su propio viaje y, sin esperarlo, vemos que el libro toma un camino que no era el que yo esperaba. Me sentí un poco desilusionada. Encuentro que el mensaje que percibo de este libro es un claro anuncio de “las mujeres sólo sirven para esto, a esto deben su existencia” (y no puedo dar más detalles porque destriparía el argumento) y lamentablemente, no lo comparto.
Aun así recomiendo su lectura, sobre todo por el desgarrador comienzo. Muchos de los diálogos y las primeras situaciones me hicieron estremecerme y llorar a lágrima viva. Ese poderío que la autora demuestra en su pluma ágil, visual y exquisita, no puede ser desperdiciado y debería ser leído aunque sea solo en la primera mitad del relato.
Eloisa
Kanon es una chica soñadora y muy sensible que se deja llevar por la magia de las letras. Es la fundadora de Mientras Lees, y se dedica a escribir novelas y relatos a tiempo completo. Comenzó su andadura en la literatura con Mujercitas, y no ha conseguido parar. Actualmente trabaja como diseñadora web y promotora editorial.