Con los buenos ratos, la vida se nos va entre lo que nos dicen que tenemos que vivir y lo que realmente vivimos. Que si estudias y te gradúas, que si te emparejas y te casas, que si tienes hijos y así va la vida, nos van preguntando qué es lo próximo por hacer y poco importa lo que estamos haciendo. Con tanto preguntar parece que ser feliz no radica en lo que haces actualmente si no en lo que estás por hacer. Nunca es suficiente, lo de hoy ya fue, qué será mañana.
Con los buenos ratos, la vida se nos va entre lo que nos dicen que tenemos que vivir y lo que realmente vivimos. Que si estudias y te gradúas, que si te emparejas y te casas, que si tienes hijos y así va la vida, nos van preguntando qué es lo próximo por hacer y poco importa lo que estamos haciendo. Con tanto preguntar parece que ser feliz no radica en lo que haces actualmente si no en lo que estás por hacer. Nunca es suficiente, lo de hoy ya fue, qué será mañana.