FICHA TÉCNICA
Dirección: Bennett Miller
Producción: Michael De Luca, Rachael Horovitz, Brad Pitt
Guion: Steven Zaillian y Aaron Sorkin, con argumento de Stan Chervin. Basado en el libro de Michael Lewis
Producción ejecutiva: Scott Rudin, Andrew Karsch, Sidney Kimme, Mark Bakshi
Dirección de fotografía: Wally Pfister
Dirección de producción: Jess Gonchor
Montaje: Christopher Tellefsen
Diseño de vestuario: Kasia Walicka Maimone
Música: Mychael Danna
FICHA ARTÍSTICA
Billy Beane: Brad Pitt
Peter Brand: Jonah Hill
Art Howe: Philip Seymour Hoffman
Sharon: Robin Wright
Scott: Chris Pratt
Elizabeth: Tammy Blanchard
David: Stephen Bishop
Argumento:
Billy Beane, una prometedora estrella del béisbol que, incitado por el fracaso de no haber demostrado en el campo todo lo que se esperaba de él, enfocó toda su naturaleza competitiva hacia el área de la dirección de equipos. Al comienzo de la temporada 2002, Billy se enfrenta a una situación deprimente: su modesto equipo, los Oakland Athletics, ha perdido, una vez más, a sus mejores jugadores a manos de los clubes grandes -y sus contratos millonarios- y encima tiene que reconstruirlo con sólo un tercio del presupuesto. Decidido a ganar, Billy se enfrenta al sistema desafiando a los más grandes de este deporte. Busca opciones fuera del mundo del béisbol y topa con las teorías innovadoras de Bill James.
Es entonces cuando se decide a contratar a Peter Brand, un economista de Yale, inteligente y con talento para los números. Juntos se enfrentan a las teorías establecidas para medir la actividad en el juego y las reexaminan apoyándose en el análisis estadístico por ordenador, hasta entonces despreciado por la clase dirigente del béisbol. Llegan a conclusiones que desafían la imaginación y van a por jugadores descartados por los demás por raros, mayores, lesionados o problemáticos, pero con habilidades claves poco valoradas.
A medida que Billy y Peter avanzan, sus nuevos métodos y su lista de “inútiles” irritan a la vieja guardia, a los medios de comunicación, a los forofos y al propio director de campo que se niega a cooperar. Finalmente, el experimento no solo cambiará la forma de jugar, sino que también aportará a Billy una nueva comprensión que trasciende del juego y que lo hará avanzar en el terreno personal.
Moneyball está basado en una historia real, y esa coletilla a veces puede asustar, si además le sumamos la temática del béisbol, un deporte que no es tan popular como en Estados Unidos, ver esta película podría echar para atrás, pero la verdad es que nos encontramos con una historia que tiene mucho de superación y lucha, y ahí cualquiera puede verse reflejado, porque más allá del deporte y las matemáticas, estamos ante un hombre normal y corriente que sufre y busca soluciones.
La cinta es un drama sólido y con un guion estupendo en el que se refleja perfectamente la transición y evolución de los personajes, sin saltos extraños en la trama, que unido a la tranquila dirección de Bennett Miller y la fotografía cuidada y bonita que vemos, hacen un buen conjunto técnicamente.
En cuanto al reparto, Brad Pitt -que sale comiendo también, deberían incluirlo en el vídeo montaje que circula por la red-, con sus tics y sus maneras, construye un buen personaje, con un carisma que atrapa y hace que empaticemos con él. Por su parte, Jonah Hill funciona, está creíble y Philip Seymour Hoffman como entrenador se sale de los cánones, es de las mejores interpretaciones de la película.
En total son 133 minutos que pasarán volando, aprenderemos de béisbol lo suficiente para emocionarnos en las escenas en las que haya partido y desde luego, una vez más, queda demostrado que si se quiere conseguir algo, solamente hace falta luchar por ello. Y si le ponemos una banda sonora que acompañe, como en este caso, todo va mejor.