En profundidad: Submarine

Publicado el 01 noviembre 2012 por Pilarm

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Richard Ayoade

Guión: Richard Ayoade, basada en una novela de Joe Dunthorne

Producción: Ben Stiller

Fotografía: Erik Wilson

Montaje: Chris Dickens, Nick Fenton

Música: Andrew Hewitt y Alex Turner

FICHA ARTÍSTICA:

Lloyd Tate: Noah Taylor

Graham Purvis: Paddy Cosindine

Oliver Tate: Craig Roberts

Jordana Bevan: Yasmine Paige

Jill Tate: Sally Hawkins

Argumento:

Oliver Tate (Craig Roberts) es un peculiar chico de 15 años que tiene dos objetivos: impedir que su madre abandone a su padre y encontrarse a sí mismo aunque sea a través de una chica.

Supongo que, al igual que las películas de Wes Anderson o Spike Jonze, Submarine no es para todos los públicos. Richard Ayoade, a quien los seriéfilos conoceréis de The IT Crowd, hace su debut directorial con la adaptación de la novela del mismo título, que ya ha sido consagrada por algunos como El guardián entre el centeno del siglo XXI.

Siempre habrá muchos que la acusarán de ser abiertamente hipster o “moderna”, como se ha puesto de moda en llamar a este tipo de cultura. Y, mientras yo misma comprendo las reticencias de mucha gente a la hora de ver ciertos productos por la superficialidad que ha alcanzado lo underground al hacerse masivo, también me parece cerril acusar a todo el mundo de querer hacerse el moderno sólo porque a ciertas personas les atrae más otro tipo de estéticas o sensibilidades.

Disertaciones sobre el indie y los modernos a parte, el caso es que Submarine es de esas películas que los británicos llaman “quirky”, un adjetivo que no tiene traducción literal al castellano, pero que significa algo así como rareza o excentricidad, pero con encanto. Así, vemos la vida de Oliver Tate, un quinceañero con una imaginación vívida, que quiere conquistar a la chica de sus sueños, al mismo tiempo que tiene que lidiar con la crisis matrimonial de sus padres.

La historia no tendría mucho que dar si no fuera por la peculiaridad estética y el sentido del humor con la que Ayoade nos la presenta. Vemos cómo la imaginación de Oliver se funde con la realidad a través de ensoñaciones, una fotografía y dirección artística que están ahí para sacar el mayor partido posible a los personajes, la luz y los paisajes del sur de Gales, mientras algunas de las mejores canciones que ha compuesto Alex Turner suenan de fondo y le dan, si cabe, más sentido y sensibilidad al conjunto.

Algo sólo es hipster si es todo fachada y nada de fondo, pero el corazón y el mimo con los que está hecha esta película no son pocos, precisamente.