En profundidad: Una vida mejor

Publicado el 26 septiembre 2012 por Pilarm

FICHA TÉCNICA:

Dirección: Cédric Kahn

Guión: Cédric Kahn, Catherine Paille

Producción: Cristina Larssen, Giles Sandoz

Fotografía: Pascal Marti

Montaje: Simon Jacquet

FICHA ARTÍSTICA:

Yann: Guillaume Canet

Nadia: Leïla Bekhti

Slimane: Slimane Khettabi

Argumento:

Ambientada en una época apocalíptica, en la que las instituciones bancarias están destruyendo Europa y un experto financiero puede arruinar la economía de un país como la India. Entre la macro y la microeconomía, los protagonistas sueñan con un futuro mejor que les permita salir de la pesadilla que viven, en la que préstamos, deudas astronómicas, trabas burocráticas y usura institucionalizada pueden destruirlo todo, incluso los sentimientos.

Generalmente, los productos cinematográficos que nos llegan de Francia suelen ser comedias románticas, o dramas experimentales; así que Una vida mejor marca la diferencia, ya que el cine de carácter social del país vecino no suele acabar en nuestras carteleras, seguramente porque ya tenemos suficiente aquí.

En esta película vemos retratado, una vez más, el drama por el que está pasando mucha gente debido a la crisis. Una pareja jóven se hipoteca hasta las cejas para poder abrir el negocio de sus sueños y luego la cosa no funciona. Una historia que estamos ya hartos de ver en los periódicos, día tras otro, desde hace ya unos cuantos años. Desde este punto de vista, la cinta no tendría demasiado atractivo de no ser por el realismo de la historia dentro de su marco socio-temporal y, sobretodo, por el interesante recorrido que realizan todos los personajes – físico y emocional – que hace que la película tome aires de road movie en algunos momentos.

A diferencia de las cintas españolas de este género, que a veces pecan de ser algo culebroneras, Una vida mejor se mantiene comedida en casi todo momento, lo que hace que, hasta las escenas con algo más de acción sean perfectamente creíbles. Y, otra gran diferencia es que, a pesar de todo, la historia cierra con un punto de esperanza, y con la idea de que la salida es posible -aunque para ello debas sacrificarlo todo-.