En proyecto de Endesa desplaza de sus tierras a 3.000 campesinos

Publicado el 05 marzo 2012 por Ginaescheback @ginaescheback

En proyecto de Endesa desplaza de sus tierras a 3.000 campesinosColombia
Por Andrés Monroy Gómez@AndresMonroyG
El periodista comunitario Bladimir Sánchez Espitia fue amenazado luego de publicar un video que evidencia abusos de la policía antidisturbios en contra de campesinos que se oponen a un proyecto que los despojará de sus tierras.
Con una millonaria inversión del español Grupo Endesa (cuyo último fichaje es la exministra española Elena Salgado), la empresa colombiana Engesa construirá una hidroeléctrica utilizando aguas del emblemático rio Magdalena. La licencia para desviar el cauce del río e inundar más de 8.000 hectáreas, casi todas de tierra fértil que sirve de sustento para más de 3.000 campesinos, fue otorgada durante el gobierno de Álvaro Uribe Vélez. Este es el punto de partida del 'Proyecto Hidroeléctrico El Quimbo'.
"De ese acierto de la empresa privada construyendo para producir y vender energía eléctrica, acordado por el gobierno, nadie nos dijo que implicaría el desalojo violento de humildes y pacíficos campesinos. Nadie lo dijo, porque esas cosas no se dicen. Quedan en silencio. Hasta que un periodista loco y arriesgado decide meterse con una cámara, con sus ganas, con el corazón latiendo en la garganta, mientras uniformados oprimen a indefensos, que como dice el arzobispo Jaime Tovar, tan solo están armados con su pobreza", señaló un periódico local.
Las medidas de protección para el periodista ciudadano son condicionadas por la policía a demostrar la credibilidad de las amenazasAnte la inminente puesta en riesgo de sus derechos, los habitantes de la zona se organizaron en 'ASOQUIMBO', para negociar con el Estado y proteger los recursos naturales que les sirven de sustento. Sin embargo, esta postura de diálogo al parecer no ha sido del agrado de Endesa, empresa que "denunció las vías de hecho" de los campesinos, solicitando la presencia de las autoridades, materializada en la llegada de los grupos antidisturbios de la policía colombiana, conocidos como ESMAD.
La acción policial de desalojo a los campesinos de la región comenzó el 14 de febrero. A pesar de las medidas adoptadas para evitar el ingreso de la prensa, Bladimir Sánchez, quien de manera independiente realiza videos a corporaciones y organizaciones comunitarias en defensa de los derechos humanos, logró captar las imágenes de los abusos y uso desproporcionado de la fuerza por parte del ESMAD.
Las imágenes, bajo el título 'El video que el Gobierno colombiano no quiere que veamos' fue subido a Youtube el 20 de febrero, circulando vertiginosamente por todas las redes sociales, convirtiéndose en pocos días en el video de periodismo ciudadano colombiano más visto en toda la historia. Luego llegaron las amenazas.
En una entrevista en una revista colombiana, Sánchez dijo que asumía la posibilidad de recibir amenazas por ese video. Le han dicho que lo van a "desaparecer", acusándolo de ser guerrillero y enemigo de las fuerzas del orden. Señaló que "el que se haya leído la historia de este país sabe que quién se atreva a denunciar una verdad es víctima de la persecución. Y yo saqué a la luz un monstruo económico y político".
La relevancia del papel del periodismo ciudadano como expresión de la sociedad en aquellos momentos y lugares donde la prensa tradicional no llega, se refleja en una de las respuestas dadas por Sánchez a la Revista Semana.
'El vídeo que el Gobierno colombiano no quiere que veamos', de Bladimir Sánchez, se ha convertido en el video de periodismo ciudadano colombiano más visto de la historiaRefiriéndose a los campesinos que son desalojados por la policía, Bladimir afirma: "Ellos no conocen Internet y no tienen acceso al video, pero esta mañana tuve la oportunidad de hablar en una emisora local y contar todo lo que había pasado, entonces cuando estaba regresando a mi casa recibí una llamada de uno de los pescadores, quien me dijo que le daba mucha felicidad que se hubiera conocido lo que pasó".
El periodista Felix de Bedout afirmó a través de su cuenta en twitter (@fdbedou): "El gobierno pensó que el video del Quimbo no pasaba de Youtube, error de cálculo y conocimiento sobre la fuerza de Internet".
La Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) rechazó estas amenazas, informó que el coronel de la Policía Juan Francisco Peláez manifestó no conocer las amenazas al realizador, condicionando a la vez la posibilidad de brindarle protección, una vez verificada la credibilidad de lo denunciado. Agrega el comunicado de la Flip que "Gina Piragauta, reportera del diario La Nación de Huila y quien dio algunas declaraciones para el vídeo de la polémica, ha manifestado seguimientos sospechosos e intimidaciones: "Hace unos días vi a dos personas, al parecer de la Policía, que me seguían y me tomaban fotografías". La periodista ha realizado cuatro informes sobre el desalojo en el Quimbo".
Por su parte, Reporteros Sin Fronteras, al denunciar la salida de la región de Bladimir Sánchez para proteger su vida, afirmó: "Debe otorgarse al periodista una protección adecuada, en vistas de su regreso al Huila. El exilio de un periodista es siempre una derrota para la libertad de informar. En este caso, también lo es para una información de interés público mayor", concluyó la organización.
Pasando por alto las amenazas contra Bladimir Sánchez, el gobierno de Juan Manuel Santos defendió las acciones de fuerza contra los manifestantes: "Que quede claro que el Gobierno ejercerá el principio de autoridad donde tenga que ejercerlo. No vamos a permitir que unos pocos impidan que el interés general predomine".
Por su parte, el ministro de Minas y Energía, Mauricio Cárdenas, calificó el video del desalojo de los campesinos de El Quimbo como "malintencionado", asegurando que "siempre surgen grupos minoritarios muy manipulados por intereses políticos para tratar de obstaculizar esos proyectos".
El presidente Santos, ignorando las amenazas contra el periodista ciudadano: "Que quede calro que el Gobierno ejercerá el principio de autoridad donde tenga que ejercerlo"Continuando con el lenguaje de estigmatización contra los opositores, Santos puso en entredicho las protestas sociales que por estos días se dan en Colombia, afirmando: "Ya lo hemos visto en varios escenarios donde la guerrilla está tratando de infiltrar cualquier amago de protesta social". Estas declaraciones se dan en medio de protestas, no sólo por la construcción de la represa de El Quimbo, sino previa a la convocatoria de una manifestación nacional para el 6 de marzo, durante el día internacional de las víctimas de crímenes de Estado.
Queda así demostrado el poder arrollador de los intereses corporativos, que avanzan sobre el interés de las comunidades que habitan los territorios afectados, alteran el medio ambiente, y en el camino a sus objetivos, cuentan con el apoyo – conocido o no – de fuerzas oscuras que amenazan a periodistas ciudadanos como Bladimir Sánchez.
Sánchez tiene en la comunicación su arma para enfrentar lo que para él y su comunidad es una suma de atropellos.
Fuente: Bottup