En tiempos de Maricastaña

Por Chicandcheapmadrid @chicandcheapmad
Desde YA soy fan incondicional de uno de los últimos locales que ha abierto sus puertas en la zona de Triball, que me sorprende cada vez que la paseo.Maricastaña es un fantástico espacio en la Corredera Baja de San Pablo que invita a olvidarse del tiempo tras su ventanal o entre su cálido mobiliario vintage, obra, como no, de Madrid In Love. Un ambiente ecléctico, chic a rabiar, y una carta (aún por cerrar) cien por cien orgánica y deliciosa hacen que ya cuente los días que faltan para volver a pasar la tarde completa del domingo perdido entre sus paredes. Nacho Rodríguez,Cris y Marie son los padres de este proyecto que se está abriendo paso de forma muy destacada en el corazón de Malasaña. Un lugar discreto, sencillo, pero que rebosa clase, estilo y buen hacer en el trato y en los fogones.El toque nórdico de Marie (alemana afincada en España) es innegable en la decoración (con muchísima presencia de madera en tonos rústicos) y también en los menús, con platos poco habituales en la gastronomía madrileña. El buen gusto no está reñido con el pragmatismo, y el local es perfecto para tomar desde un desayuno a las primeras copas de la noche.Este pasado domingo me decanté por un estupendo brunch en buena compañía. Elegí la opción Ibérica: Tablita de quesos y jamón, huevos fritos con bacon y pan tumaca. Además, bol de frutas con yogur y cereales, una cestita con bollería y, para rematar, un sorbo de Bloody Mary. Todo riquísimo y así de bien presentado:Por lo demás, la carta es ligera, natural 100% y deliciosa. Sandwiches de calabaza, , dados de atún marinados y buenísimas Tartes Flambées (Alsaciana, con mango o con mozzarella, rúcula y cebolla morada), entre otras muchísimas opciones que cambiarán según temporada. Maricastaña es un local con carácter, diferente, que trae un aire cercano pero internacional, muy a lo SOHO neoyorquino, al centro de Madrid. Está hasta la bandera. No lo dudes, libérate de la resaca este domingo y reserva ya tu mesa.