Encontrado el eslabón perdido entre los gusanos y los artrópodos. Un cactus andante

Por Tonicerocerosiete
El fósil podría ser el antepasado más antiguo descubierto hasta ahora de las actuales arañas, siendo el primer eslabón perdido conocido entre los gusanos y los artrópodos. Lo han designado ‘Diania Cactiformis’ y habitaba el fondo marino. Un equipo de investigadores chinos halló el fósil de un ‘cactus andante’ de hace 520 millones de años que podría ser el antepasado más antiguo descubierto hasta ahora de las actuales arañas, según informaron estos científicos.

La criatura, con diez pares de patas articuladas y 6 centímetros de longitud, se llama ‘Diania Cactiformis‘ y es el primer eslabón perdido conocido entre los gusanos y los artrópodos.

Diania habitaba el fondo marino de lo que hoy es la provincia de Yunnan, en la cordillera del Himalaya y al suroeste del país asiático.

“La importancia de Diania para la biología es que los artrópodos son uno de los grupos de animales invertebrados de mayor éxito y es muy bonito el haber descubierto lo que puede ser el animal más primitivo de este grupo con patas articuladas”, señaló Jianni Liu, líder del equipo de investigación conjunta entre la Universidad de Freie en Alemania y la del Noroeste de China, en Xian.

Liu añadió que este descubrimiento es “importante porque aporta evidencias de que los artrópodos evolucionaron a partir de los lobopodios”, esto es, los antepasados de los gusanos, cuyos registros fósiles se remontan al periodo Cámbrico.

Los cuerpos blandos de los extinguidos lobopodios estaban formados por segmentos y sus patas solían acabar en una uña en sus extremos.

El fósil fue descubierto en 2006 durante una exploración en el distrito de Chengjian, en Yunnan, y a la luz de las investigaciones podría ser el miembro más evolucionado de los lobopodios o bien el primer artrópodo, que en la actualidad suponen más del 80 % de las especies vivas.

La doctora Liu acaba de publicar en la revista Nature la tesis en la que ella y su equipo han estado trabajando, donde se refleja la habilidad que la Diania tenía para desplazarse a gran velocidad y saltar con agilidad, a pesar de que este ‘cactus andante’ también se extinguió.

El equipo cree que algunos de los apéndices de la Diania evolucionaron hasta convertirse en articulaciones depredadoras que dieron más capacidad de supervivencia a los artrópodos.

Fuente: http://www.20minutos.es/