Los hechos se registraron cuando en una primera inspección realizada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) reportó a la autoridad investigadora sobre el hallazgo de una persona calcinada en la calle Eladio Romero el pasado 21 de noviembre, es por ello que la delegación de Servicios Periciales de la Fiscalía especializada en Derechos Humanos se trasladó al lugar para iniciar una investigación.
En la inspección de los alrededores del sitio, a cargo de una perito arqueóloga y otra de campo, además de la Policía de Investigación de la Huasteca Norte (PDI), encontraron en una bolsa plástica 4 armas de fuego tipo fusil; 30 cargadores de varios calibres; 41 cartuchos útiles 5.56 y 7.62; un chaleco táctico; 11 botones metálicos quemados; y 35 parches circulares y rectangulares con leyendas que hacen alusión a un grupo de la delincuencia organizada.
En el sitio también se contó con personal de la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas, y el área fue resguardada por agentes de la Policía Estatal y de la Sedena.