Lo primero, he de deciros que la sede nueva de Penguin Random House es impresionante, inmaculada, ordenada... no sé, parecía como unas oficinas del tipo laboratorio de Umbrella (si habéis visto Resident Evil, sabéis a lo que me refiero).
La verdad es que me apetecía un montón estar en esta presentación, porque a María se la veía tan feliz que ya solo por eso mereció la pena estar.
Nos estuvo contando cosas muy interesantes de sus novelas. Había gente que identificaba a la protagonista de Las hojas de Julia con la misma autora, y ella dijo que, aunque fuera muy optimista y risueña, veía más cosas de ella en Nora que en Julia, porque es más organizada y seria. También dijo una cosa que sorprendió bastante: ella no cree en el destino. ¿Quién lo diría, verdad? Digo que sorprendió porque ambas novelas parecen estar regidas por este elemento, el amor predestinado, la profecía en Las hojas de Julia... da la sensación de que María también creería en él, ya que hasta a ella misma le ha pasado lo mismo que a sus protagonistas (se casó con su único amor, y llevan 13 años juntos).En sus personajes no incluye aspectos ni personalidades de gente que conoce. Claro está, algo tiene que haber: cosas genéricas, algún tinte del carácter de alguien... pero nada concreto y específico que ella diga "Esto le ha pasado a tal o a Pascual". Esto hace que sus novelas sean más originales aún, ya que todo sale de su propia imaginación.
Y, para finalizar, os voy a dar envidia... Nos encontramos con una merendola por parte de Suma (unos croissanes riquísimos) y con una caja de bombones (mis favoritos, por cierto) que María Jeunet trajo :D
De todo lo que cundió el encuentro nos tuvieron que echar (suena muy mal jajaja). La sede tenía que cerrar y nosotros seguíamos dentro aún, con María firmando a contrarreloj los libros de los que asistimos allí.