Traigo hoy a estas páginas otro de los episodios acontecidos en la pasada Feria del Libro de Sevilla donde tuvimos el placer de poder conversar con Christian Gálvez que vino a presentar su nueva novela Rezar por Miguel Ángeltras el éxito de su anterior obra Matar a Leonardo Da Vinci, ejemplares que de forma independiente forman la trilogía de las crónicas del Renacimiento. Una trilogía que no obliga al lector a leer todas para comprender cada libro, son independientes nos contaba, y cada cual puede quedarse con la lectura que más le apasione aunque si se leen en su conjunto la imagen global te permite ver una subtrama que se completa entre todas.
Europa, siglo XVI. El descubrimiento de un nuevo mundo pone en evidencia a las Sagradas Escrituras. Nuevas tierras y razas que no aparecen en la Biblia tambalean los cimientos del cristianismo mientras Martín Lutero se enfrenta a la Santa Sede y provoca un cisma con terribles daños colaterales.
La Florencia de los Médici verá partir a un joven Michelangelo Buonarroti, llamado por los Estados Vaticanos, donde alcanzará la gloria en la Ciudad Eterna. Mediante cincel, pigmento y carácter creará su propia leyenda mientras el mundo conocido no volverá a ser el mismo.Mientras, al otro lado del Mediterráneo, el hijo de Juana I y Felipe el Hermoso accederá al trono de España y se convertirá en el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, lo que supondrá un gran problema para la Francia de Francisco I y la Roma de Gregorio XIII. Michelangelo Buonarroti creará.Carlos V destruirá. Gregorio XIII rezará. Y la Iglesia Católica cambiará para siempre.
Hablamos con un Christian Gálvez encantado de estar en Sevilla y más si cabe por la aparición en su novela de Juanelo Turriano que trabajo y vivió en Sevilla, lo que consideraba una ocasión excepcional para tratar en uno de los escenario de sus fuentes, episodios que acontecen en su libro. En una charla distendida en los salones del Hotel Inglaterra, el autor hablo para los medios respondiendo a preguntas e intercambiando cometarios y opiniones sobre el meritorio trabajo que está realizando con un proyecto que le ha llevado tres años sólo de investigación sobre el terreno. “Yo quería entender por qué surge el Renacimiento porque no te lo cuentan” mientras que a cada personaje le ha dedicado dos años sobre su figura.
Hacía 50 años que nadie escribía una novela sobre la figura de Miguel Ángel, un genio con menos misterios que Leonardo, pero con una personalidad brutal al ser contratado por la Iglesia católica, un creyente que hace lo que hizo y es visible. Un autor que se negó a pintar en la Capilla Sixtina cualquier referencia al Nuevo Testamento y cuyas figuras son todos pasajes del Antiguo Testamento donde presenta a Adán con ombligo, libra a la mujer del pecado original al ser Adán el que coge el fruto prohibido (manzana que no aparece en la biblia). En esas representaciones iguala a la mujer con el hombre y la pregunta es por qué y no qué hizo y en su libro hay 620 páginas para averiguarlo comentaba el autor entre sonrisas.Miguel Ángel le ha supuesto un reto mucho mayor que Leonardo puesto que hasta ahora la gente le ha relacionado con su primer libro y este supone un reto doble, superar la calidad de la primera novela (superar la trama, la historia) y conseguir que cuando se hable de Miguel Ángel se le relacione a él y a su novela. “He intentado arrancar esa patina de genialidad que tienen estos dos personajes y presentar a las personas de carne y hueso que es más interesante. Con Leonardo es todo más ambiguo porque hay muchos huecos que rellenar y la vida de Miguel Ángel esta todo más presente y se puede buscar en muchos medios por lo que ser original y que interese es todo un reto”.
Ha querido mostrar hombres que hoy en día son considerados como genios y que en su época eran simples artistas. De Leonardo piensa que fue un hombre adelantado a su época, un visionario pero que fracasó en todo lo que intentó y eso y la genialidad son dos conceptos distintos. Christian recordó la anécdota acontecida a Miguel Ángel cuando acabó el David en el que alguien le llamó genio a lo que contestó, “si supieras la cantidad de esfuerzo que me ha costado hacerlo no me llamarías genio”.Estas ideas son las que le ha marcado para comenzar su libro con la cita de Miguel Ángel “El mayor peligro para casi todos nosotros no es quedarnos sin llegar a la meta porque esta sea demasiado alta, sino alcanzarla precisamente porque sea demasiado baja”. Hablamos de ambición, autorrealización, etc. Eso es lo que más le llama la atención de ellos, de que los consideramos genios inalcanzables cuando en su tiempo fueron unos fracasados, hablamos de un Leonardo que tuvo que ir de ciudad en ciudad buscando una oportunidad, de un Miguel Ángel que solo era feliz esculpiendo y que no quería pintar la Capilla Sixtina y que lo reconoce en sus escritos de su puño y letra. La charla termino con un Christian Gálvez desvelando que tiene otra trilogía en mente que se sincroniza con estos tres libros a la que ha ido dando forma tras ver la luz la actual.