En las últimas semanas hemos sido testigos de drásticos cambios en nuestras vidas. Muchos de estos cambios ya estaban siendo producidos o era sabido que ocurrirían, pero la actual crisis provocada por la pandemia mundial del COVID-19 no ha hecho más que acelerarlos.
Entre estos cambios están principalmente todos aquellos relacionados con hábitos de producción y consumo.
Los más evidentes son el aumento del trabajo y la escolarización desde casa, el descenso del consumo, las caídas de las bolsas, el auge de las monedas virtuales y las criptomonedas, la caída del turismo a nivel mundial, el desplome del precio del petróleo y la economía mundial. Al mismo tiempo se están haciendo realidad las previsiones a futuro del aumento del trabajo a distancia, de la automatización de muchos ámbitos productivos y la demanda, en los próximos años, de energías renovables. Esto último además lo acaba de ratificar recientemente la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
Pero, como decíamos no es novedad. Tras todas las cumbres climáticas y encuentros oficiales relacionadas con el medio ambiente, los gobiernos mundiales siempre se comprometen a aumentar la producción de las llamadas energías limpias, copromiso que efectivamente también asumieron en la última cumbre COP 25 de finales de 2019, en la que incluso el Banco Europeo de Inversiones (BEI) anunció que dejará de financiar proyectos relacionados con las energías fósiles en 2021.
Además, todos los Estados del encuentro se comprometieron a dar un cambio energético en las próximas décadas. Pero es muy probable, como decíamos, que esto se acelere con la crisis actual.
Estudiar energías renovables
Muchos de nuestros lectores, concienciados con la necesidad de un cambio de paradigma, se preguntarán ahora, con todas las modificaciones que están habiendo a nivel laboral, qué podrían estudiar o cómo se podría redirigir su actual carrera o sus estudios en el mundo de las energías limpias.
Estos lectores que están cursando o acaban de finalizar sus carreras en ingeniería, arquitectura, ciencias ambientales o geología, dada la incertidumbre actual del mundo laboral pueden apostar por una carrera que además de segura a largo plazo es beneficiosa con el medio ambiente y el mundo que queremos construir y mejorar.
Una de las posibilidades es realizar un máster en energías renovables. Se estima que este sector generará un total de 14 millones de empleos nuevos. Es, además, una graduación certificada que se puede cursar de manera remota 100% online o a distancia.
El mismo se puede realizar al ritmo que el alumno requiere, entre 9 y 24 meses, y está certificado por las prestigiosas Universidad de Nebrija e IMF Business School.
Cuáles son las energías renovables a estudiar
La utilización de fuentes de energías renovables en la actualidad están creciendo de manera exponencial. Se trata de una respuesta limpia a la contaminación y el deterioro ambiental, del cual el cambio climático es solo la punta del iceberg.
Por lo tanto en los siguientes años y en las siguientes décadas irá en aumento la necesidad de expertos que dominen sobre cómo funciona el mundo de las diferentes fuentes energéticas.
Cuando hablamos de energías renovables nos referimos a todas ellas, siendo las más representativas la energía eólica, la solar, la fotovoltaica y la térmica, pero también se encuentran, entre otras, la mini hidráulica o la biomasa.
Por otra parte, el estudio y desarrollo de las fuentes está relacionado con lo que se conoce como eficiencia energética, es decir el uso eficiente de la energía con el objetivo de reducir la cantidad de energía requerida para proporcionar productos y servicios.
Desarrollar nuestros estudios y conocimientos en el campo de las energías renovables y la eficiencia energética amplía nuestra posibilidad de trabajar en este mundo de las energías más limpias.
Este post es autoría de Ecocosas puedes ver la entrada original en Energías Renovables: cómo y por qué formarse