Abtenerse puristas de la Ensalada César original, sí, la que no lleva ni pollo, ni anchoas, ni daditos de queso, solo algo de queso parmesano, por que la que hoy os traigo es una Ensalada César ... a mi manera, y lleva unos deliciosos y crujientes trocitos de pollo empanado, unas sabrosas anchoas, un buen puñado de daditos de queso y una Salsa César, también a mi manera, que no puede estar más rica.
Si ahora que ya sabéis que no váis a toparos con la receta original, os apetece ver cómo la preparo ¡seguid leyendo!
La preparo en cualquier época del año, de hecho es la preferida de mi sobrino que le encanta tropezarse con sustanciosos y crujientes trocitos de pechuga empanada, y para mí, en esos días locos de trabajo que no te acuerdas ni de que tienes que hidratarte bebiendo de vez en cuando, puede convertirse en mi menú de mediodía.
Que os voy a contar, a horas luz de las que venden en el supermercado ya preparadas, en esos recipientes de plástico con compartimentos varios para alguno de los ingredientes de la Ensalada César no original. Ya sé que a muchos les saca de apuros, pero todavía me resisto y prefiero preparármela yo.
La salsa tampoco tiene nada que ver. Para este tipo de salsas me viene muy bien el Mezclador de Vinagretas y Salsas de Silberthal, aparece en las fotos y recuerda que con el código atable10 obtienes un descuento del 10%, ya que me permite mezclar bien las salsas gracias a un elemento que lleva en su interior. Podemos conservarlas en el frigorífico y utilizarlo para servir directamente en la mesa, ya que no gotea, es hermético, permitiendo que lo volvamos a agitar las veces que haga falta sin peligro de manchar nada cuando abramos la tapa, y además es elegante.
Es cierto que preparar nosotros la salsa nos lleva más tiempo que si la compramos ya preparada, por eso me viene bien prepararla de esta forma, hacer más cantidad y conservarla en el frigorífico para volverla a utilizar en otras ensaladas.
Y ahora, ¡Vamos a por la receta!
- Lechuga romana, Iceberg o brotes de Ensalada
- 1 Pechuga de pollo fileteada
- 100 gr. de Queso Emmental
- 100 gr. de Pan
- 6 Filetes de Anchoa
- 1 Huevo duro
- 1 Huevo fresco
- 4 dientes de Ajo
- Pan para empanar
- 50 ml de Aceite de Oliva Virgen Extra
- 10 ml de Vinagre balsámico de Módena
- 1 Cucharadita de Mostaza
- 3 Cucharadas de Yogur Natural
- 1 Cucharadita de Salsa Perrins
- Zumo de 1/2 Limón
- 25 gr. de Queso Parmesano rallado
- Sal y Pimienta
- Cebollino
- Aceite para freir
- En un recipiente que podamos tapar después, batimos un huevo y le añadimos dos dientes de ajo fileteados. Cortamos los filetes de pechuga en trozos no demasiado grandes y los dejamos macerar en el huevo durante un par de horas.
- Cortar el pan en dados pequeños. En un cuenco añadir dos dientes de ajo picados, una pizca de sal y un chorrrito de aceite. Mezclar y añadir los dados de pan. Remover para que se impregnen del aceite y cuando estén bien barnizados distribuirlos en una bandeja de horno e introducirlos para que se doren en el horno (grill) a 180ºC. Cuando estén doraditos, retirar y dejar enfriar.
- Ahora vamos a preparar la salsa de aderezo. En el mezclador de salsas añadir el aceite, el vinagre, la salsa Perrins, la mostaza, el queso parmesano rallado, el zumo de limón, el yogur y salpimentamos. Cerramos el mezclador, agitamos y listo. Reservamos en el frigorífico.
- En un repiciente poner el pan rallado y rebozar los filetes de pollo que teníamos macerando en el huevo. Freir en abundante aceite caliente. Cuando estén dorados, retirar y disponer en un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
- Ha llegado el momento de montar la ensalada. En un cuenco poner una buena base de las lechugas que hayamos elegido. Disponer por encima los trozos de pollo rebozado y el queso emmental cortado a daditos. Agregar un buen puñado del pan tostado y servir el resto en un cuenco para quien quiera añadir más daditos de pan. Cortar el huevo duro en 8 trozos y distribuir también por encima, añadir las anchoas y finalizar espolvoreando con cebollino picado. Aliñar la ensalada con la salsa que tenemos reservada en el frigorífico y sacarla también a la mesa para quien quiera más cantidad.