Seguimos con las ensaladas veraniegas, ésta la hemos completado con un bacalao confitado y huevo cocido, así que es un plato totalmente completo.
En un primer momento pensé en poner el bacalao solamente desmigado, a nosotros nos gusta ya así, pero luego pensé que al confitarlo queda aún más sabroso y se pueden sacar perfectamente las lascas del bacalao.
El brócoli es una verdura que puede que te guste mucho o que no te guste nada en absoluto, a mí me gusta bastante y a mi gente realmente no les gusta, por eso suelo prepararlo disfrazado con algunas cosas más para que se lo coman.
Os voy explicando cómo prepararla, para hacer la ensalada necesitamos:
1 brócoli grandecito o dos pequeños (si sobra luego podéis preparar otra cosa)
4 huevos cocidos
4 trozos hermosos de bacalao desalado
2 tomates
Media cebolla tierna
Un puñado de pasas
Olivas negras sin hueso
Aceite de oliva virgen extra
Vinagre de Módena
1 cucharada de mostaza antigua
Lo primero que haremos es cocer el brócoli en ramitos pequeños hasta que quede tierno pero sin pasarnos, algo menos de 10 minutos, escurrimos y dejamos enfriar.
En un cazo colocamos los trozos de bacalao y cubrimos con aceite de oliva, cocemos a fuego muy lento hasta que se empiecen a separar las lascas. Sacamos del aceite y dejamos enfriar.
En un cuenco pondremos, el vinagre de modena, 6 cucharadas soperas del aceite de confitar el bacalao, la mostaza, los tomates pelados y cortados en cuadrados pequeños, la cebolla cortada en trocitos, las olivas negras en rodajas y las pasas, añadimos un poco de sal y mezclamos bien.
Separamos las lascas del bacalao, desechamos las espinas y la piel.
Repartimos sobre el brócoli la mezcla del tomate, sobre este añadimos las lascas del bacalao y los huevos cortados en cuartos.
Servimos la ensalada, en un cuenco pondremos el resto del aceite de confitar el bacalao por si es necesario añadir un poco más una vez que esté repartida en los platos.