Pero cuando descubrí que hay mil maneras de comerlas, me hice fan absoluta de las espinacas!! En crema, en ensalada, como relleno, o ingrediente de otros platos.
Es una verdura muy completa y rica en calcio, y muy económica y fácil de encontrar.
- 1/2 bolsa de espinacas frescas (ya vienen lavadas)
- 3 o 4 nueces troceadas
- Una cucharada de pasas sultanas
- Un trozo del queso que nos guste. (curado, de cabra, blanco, etc.)
- Jamón serrano en lonchas o en dados
- Un chorreón de miel de caña por encima
- Vinagre de módena
- Cebolla caramelizada (podemos comprarla ya hecha, o hacerla en un momento)
- Salsa de yogur (opcional) (pincha aquí para ver la receta)
Si queremos preparar la cebolla caramelizada, es muy sencillo. Necesitamos:
- 1 cebolla grande
- 1 cucharada de azúcar moreno
- Un chorrito Coñac, Brandy (o cualquier licor que tengamos por casa y sea dulzón), también se puede hacer con vinagre
- Una curcharada de mantequilla
2. Cortamos la cebolla en juliana (tiras), y las echamos a la sartén. Cocinamos hasta que la cebolla esté tierna y casi transparente.
3. Añadimos el azúcar, y cuando observemos que empieza a desaparecer (se funde), echamos el chorrito de licor o vinagre. Movemos con cuchara de madera, y veremos como poco a poco, el liquido desaparece para dar lugar a una textura de caramelo fundido, con un bonito tono dorado.
Apagamos el fuego, y dejamos que temple.
1. Y ahora hacemos la ensalada en un plis plas. Las espinacas frescas envasadas ya vienen limpias y listas para tomar.
2. Las echamos en el plato con todos los ingredientes excepto la cebolla caramelizada y la salsa de yogur. Aliñamos como el vinagre de módena y la miel de caña. Echamos un poco de salsa de yogur por encima, y la cebolla caramelizada.
Para la salsa de yogur, os dejo el enlace a la receta. Se hace en un minuto y es infinitamente más sana y ligera que la se vende hecha. (pincha aqui)