Ho'oponopono es una técnica hawaiana de resolución de problemas de la que se está hablando mucho últimamente. El Dr. Hew Len es una de las personas que ha contribuido a la difusión de la técnica y también su discípula Mabel Katz, autora del libro El Camino más fácil
Hace unos meses una amiga me estuvo hablando de Ho'oponopono y buscando más información encontré un vídeo de Mabel Katz de cómo podemos criar a nuestros hijos y un artículo sobre Lecciones de Ho'oponopono de los niños, con esta filosofía de vida y muchas de sus reflexiones me resultaron muy interesantes, porque la mayoría de las personas tenemos como meta criar niños y niñas felices, pero muchas veces no sabemos cómo hacerlo.
Según nos explica Mabel, la clave está en ser felices nosotros, porque las relaciones con nuestros hijos se basan principalmente en lo que hacemos y no tanto en lo que decimos, nuestros hijos nos observan en cada momento, somos su ejemplo a seguir. Por lo tanto, si queremos que ellos aprendan a ser felices, es fundamental empezar nosotros a alcanzar nuestra propia felicidad. Si nosotros estamos bien, ellos también.
Los hijos son nuestros espejos y si alguna vez no te gusta lo que ves, busca dentro de ti y seguro encontrarás eso mismo que se refleja...Esto es algo difícil de admitir, la primera reacción es negarlo, pero si le das cabida a esta idea comprobarás lo cierto que es.
En su libro y sus vídeos Mabel cuenta cómo la rabia de su hijo la hizo "despertar" y darse cuenta de que no era feliz, él mostraba el enfado que ella sentía. Lo que la llevó a una profunda transformación personal, porque a pesar de ser exitosa en todos los aspectos de su vida, no estaba realmente satisfecha.
En su proceso de cambio descubrió que la felicidad debemos encontrarla dentro de nosotros, no fuera en las cosas que tenemos. El éxito radica en conseguir estar tranquilos independientemente de lo suceda, porque muchas veces no es lo que nos pasa si no cómo reaccionamos a lo que nos sucede, debemos dejar de ser víctimas de las circunstancias.
Esto es algo que me gusta transmitir a mis hijos, todo tiene múltiples puntos de vista y yo intento que ellos piensen en el positivo, o por lo menos sean capaces de encontrar algún aspecto bueno de lo que ocurre. Estamos muy acostumbrados a la queja por la queja, es como una forma social romper el hielo con la gente, forma parte de la comunicación diaria, que mal el tiempo, cuanto tarda, que lento...son cosas muy comunes que decimos o escuchamos cuando no sabemos que decir, pero sin darnos cuenta pasamos la vida quejandonos. Nadie dice que que bonito día cuando intenta buscar conversación...
La queja resulta fácil, todos sabemos hacer esto muy bien. Sin embargo, sentirnos agradecidos resulta más complicado, de qué voy a dar gracias si no tengo trabajo o dinero, o las cosas no van como yo quiero. Seguro que si buscas bien dentro de ti hay muchas razones para dar las gracias.
Damos todo por hecho, si mi familia está sana debe ser así, no me siento agradecido de que mis hijos estén bien, pero si por el contrario las cosas no son así, quejarme es más natural y normal. Creo que esto es algo en lo que debemos pensar y fundamental de transmitir a nuestros hijos.
El agradecimiento es algo que no nos enseñan de pequeños y hubiese sido una suerte haber crecido sintiéndome afortunada en vez de culpable por todo, porque al contrario de dar gracias nos transmite un sentimiento de culpa por todo. Si no comes, tienes la culpa de los niños que no tienen comida, esto no tiene mucho sentido. Una cosa es que seamos conscientes de que hay niños que no comen y nos sintamos afortunados por tener comida, y otra muy diferente es que no terminarnos la comida del plato nos haga responsable del hambre del mundo.
En un vídeo que pude ver a través de Youtube, Mabel Katz en colaboración con la Fundación "Tu Cambio por el Cambio", a los niños de la calle en Ecuador para que sean capaces de no sentirse víctimas de las circunstancias y descubrir la felicidad en su interior sin depender de nada ni nadie, les explica con metáforas adaptadas para sus edades las claves de la filosofía de Hoponopono para niños.
Tenemos que cambiar nuestras creencias como lo explica la famosa frase de Henry Ford, "Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto" y dejar a un lado creencias limitantes, que además transmitimos a nuestros hijos. Dejemos de decirles que esto es dificil o aquello es imposible, yo evito hacerlo aunque como muchas madres estoy programada para ello, en vez digo todo es práctica, si no se te da bien practicando mejorarás, pero deja la creencia negativa a un lado.
Otra cosa que me compartí hace un tiempo de Deepak Chopra sobre la Ley del Dharma también está en consonancia con la filosofía de Ho'oponopono para niños y es que "tenemos tanto miedo de que nuestros hijos encajen en esta sociedad que si dicen que se le dan bien las artes, pero no las matemáticas, inmediatamente le ponemos un profesor particular de matemáticas, en vez de uno de arte que le ayude a explorar ese talento único, un gran artista siempre puede encontrar un gestor que le lleve la contabilidad".
Cada niño es único y si es feliz conseguirá aquello en lo que destaca, pero tampoco tenemos que obsesionarnos porque lo que será de mayor, si no son felices de nada les valdrá...
Mabel Katz tiene libro con audio CD incluido, El Camino más fácil para crecer
¿Conocías la técnica del Ho´opononopono para niños?