¿Qué representa la violación de la Misión Diplomática de México por parte de Ecuador?
La mañana del sábado 6 de abril representó para el mundo de las relaciones internacionales un momento de importante reflexión. Por ahora, no se podría categorizar como un punto de inflexión en la región, pero sí de gran relevancia sobre el rumbo que esta adquiriendo la dinámica internacional. Para ello, repasemos los siguientes eventos:
1. Con el gobierno de Donald Trump (2017- 2021), las medidas directamente contrarias a la institucionalidad multilateral y el derecho internacional, formaron parte de su cotidianidad. En ese período, Estados Unidos se retiró de organismos internacionales (Unesco), de acuerdos internaciones (Acuerdo de París, Pacto Mundial sobre la Migración) y de la Asociación Transpacífico (TPP).
2. Se impulsaron esquemas «minilaterales» para alcanzar consensos en temas y actores que puedan ser generalizables a terceros como el Aukus y Quads en materia de seguridad, y se fomentó el Grupo de Lima para aislar a Venezuela.
3. Se fomentó el desconocimiento del Gobierno venezolano, acción que marcó un precedente en las relaciones internacionales para aislar al Gobierno, de su representatividad ante los organismos internacionales y misiones diplomáticas, retener sus recursos y activos en el exterior, dañar las instalaciones de las embajadas e impedir su relacionamiento internacional.
4. Se reimpulsó el uso de las sanciones internacionales como mecanismo de política exterior para condicionar cambios en el sistema de relaciones y alianzas internacionales, dirigiendo su accionar contra las naciones emergentes con grandes yacimientos y reservas de recursos naturales.
5. Se incitaron conflictos geopolíticos con influencia global, en la cual la OTAN y Estados Unidos desafiaban la influencia de Rusia, China y de las naciones emergentes, tratando de desconocer y evitar la consolidación del orden multipolar, desencadenando y ampliando conflictos, tal como se ha desarrollado en Ucrania, el que impulsan en el mar Meridional de China a través de Taiwán; entre Israel y Palestina, y sus secuelas en los canales globales de comercialización.
6. El sábado 6 de abril se irrumpió en la misión diplomática, violentando la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, la inmunidad de la sede y la del embajador de México en el Ecuador, con argumentos de supuesta normativa interna y «riesgo de fuga», en desdén de las normas internacionales. Caso similar a lo ocurrido durante la dictura en Uruguay de Bordaberry (1976), en el marco del Plan Cóndor, donde se violentó la Misión Diplomática de Venezuela, secuestraron y desaparecieron a Elena Quinteros, una maestra y militante del Partido por la Victoria del Pueblo uruguayo, generando la ruptura de las relaciones diplomáticas entre Uruguay y Venezuela, similar al caso Ecuador-México.
¿Pero esta situación es aislada? ¿Este tipo de Gobiernos, como el ecuatoriano, que experimenta un alta escalada de violencia interna, tomó esta decisión aislada de violentar las normas internacionales sin consecuencia o sin temor?, actuando muy parecido a los estadounidenses cuando roban los activos de las naciones sancionadas en pro de sus intereses y seguridad. Esto hace pensar en ese impulso forzado del «Orden Basado en Reglas» de normas a la medida de los tradicionales hegemones.
La fragmentación, crisis, violencia y guerra, son términos de frecuencia en el día a día. Pero ¿adónde quieren llevar el orden internacional? ¿Qué tipos de normas desean implementar? ¿Un nuevo orden a través del caos? Un cambio de paradigma se intenta profundizar e implementar fragmentado el actual. ¿Qué rol jugará el sur global?
La Celac se estará pronunciando sobre esto en la próxima reunión de urgencia, pautada para el 8 y 9 de abril, donde el rechazo debe ser taxativo ante la violación de la normativa internacional que regula la coordinación y convivencia entre los Estados.
Orelys Castillo