Entre Bambalinas (13): De cuando mi yo fangirl se topa con los muros de 'El corredor del laberinto'

No es que me olvide de las secciones pero a veces realmente no sé qué contar en ellas, entonces quedan en un estado de semiinconsciencia hasta que decido que es hora de decir algo sobre ellas. Como es el caso de Entre Bambalinas.

Así pues, en Entre bambalinas os haré un resumen de la manera más informal posible sobre cómo me ha ido la semana. No solo os comentaré mis lecturas actuales o futuras, sino también lo que he visionado, si he asistido a algún evento, me he hecho con alguna adquisición interesante o, simplemente, lo que quiera destacar.

¿Qué ha pasado esta semana?

Lo primero que vi, los muros

A veces en la vida se necesita una simple imagen para expresar mil sentimientos y sensaciones, por lo que esta entrada será bastante gráfica. Ayer dio inicio el 32 Salón Internacional del Cómic de Barcelona que, como sabéis, cubro desde hace un par de años. El evento era tal y como esperaba, con exposiciones y stands para gastar el dinero. Mi serenidad era parca en sentimientos hasta que nos acercamos a un par de paneles dedicados a próximas adaptaciones de cómics... y entonces, apareció el muro ante mis ojos.

Cola para entrar en la Caja y conseguir la camiseta

¿Sabéis esos momentos en la vida en que sentís que el mundo entero se para y sois conscientes de todo, de los colores, los olores, los sonidos, hasta de vuestra propia respiración, y necesitáis varios segundos para situaros y daros cuenta de que estáis viviendo algo sumamente intenso y devastador? Esto es lo que me pasó cuando, paseando con mi amiga y bloguera Nú por el Salón, me topé con los muros de El corredor del laberinto, archiconocido libro de James Dashner. 

El tráiler en bucle, felicidad infinita

Justo comentábamos que el Salón era un poco flojo en cuanto a stands cuando, de repente, a mis oídos llegó la frase de "¿Qué sitio es este?". Enseguida me paré en seco, alcé la mirada lentamente y, sí, joder, primero me topé con una enorme pantalla plana que estaba emitiendo ¡¡El tráiler de El corredor del laberinto en español!! Pero ahí no quedó la cosa: mientras iba abriendo la boca y ahogando un chillido, me di cuenta entonces que, joder, ¡¡hostia puta, eran los fucos muros del laberinto, allí mismo, en el Salón!!

Podías entrar y emular a Thomas en su momento YOLO del tráiler

Mientras veía el tráiler entero, y un segundo visionado seguidamente pues lo daban en bucle, no hice más que balbucear y mover las manos, ante la escrutadora mirada de Nú -que ella no puede mentirme, seguro que estaba asustada porque nunca me había visto así de histérica-, además de repetirle constantemente qué hacían los muros en el Salón y por qué estaban allí los jodidos muros. Ya sabéis, en estas ocasiones no se puede hablar muy coherentemente. 

La fuca Caja, verduchos

Enseguida vislumbré a un chico que estaba plantado delante de ¡¡LA CAJA!! y explicaba a un grupo de chiquillos de qué iba todo. Me acerqué rauda y, entre excitada y chillona, le pregunté si daba material y qué pensaba decir sobre el tráiler, a lo que me contestó que daban camisetas -un tanto sosas, por cierto- si realizabas un acertijo, que era un laberinto, y entrabas en un sorteo de una cámara, pero nada de material relacionado con los libros ni con la película. Un gran chasco que se clavó en mi corazón fangirl. 

Belleza hecha exposición

Cuatro tráilers seguidos más tarde y una treintena de fotos a mis espaldas, sin haber participado en el tour para conseguir la camiseta porque había una cola kilométrica, mi amiga Nú consiguió sacarme de allí, pero podéis creerme que, cada vez que volví a pasar, vi el tráiler un par de veces más e hice otras tantas fotografías. Es lo que  tiene en fangirlismo... que te posee. 
¿Habéis ido o pensáis ir al Salón del Cómic de Barcelona? ¿Os poseerá el fangirlismo como a mí?
Sin más, termino este post con un videoclip que me he topado hoy en Facebook y que no hago más que ponerlo en repeat.

¿Qué tal vuestra semana?