Mañana miércoles 25 de Junio de 2014 el juez Castro decidiría si hay motivos para sentar en el banqullo a Iñaki Urdagarín “El Duque empalmado” y su señora “Miss Caixa” la Infanta Cristina. Desde nuestro, modesto, parecer todo apunta a que la cabeza del Duque peligra todavía más desde la llegada al trono de Felipe VI y III de Leticia. La cabeza de Urdagarín será servida al populacho para darnos una prueba inefable de los nuevos aires del reinado de Felipe VI. Se dice que la Fiscalía, la acusación pública, contempla solicitar entre 10 y 19 años de cárcel para el Duque de Palma, Urdagarin, a quien acusará de un delito de malversación, prevaricación, falsedad documental, fraude a la administración y tres delitos fiscales. La pena concreta dependerá de si el yernisimo del Rey abona antes, junto a, su ex-socio, Torres, los cerca de seis millones de euros de los que se apoderaron (sic) de las Administraciones públicas.
Un castigo ejemplar al Duque podría salvar de la quema a Cristina (la corona y el propio Urdagarín se darían con un canto en los dientes si así fuera)
Sentar en el banquillo a Cristina podría llevar a Urdagarín, al que la monarquía le importa un bledo, quemar todas sus naves y acusar al mismo Juan Carlos I de las mismas practicas (algunos correos presentados por su ex-socio dan pistas sobre ello). Un escenario así no lo quiere ninguna de las partes. Así, nos decantamos por la cabeza de Urdagarín, castigo ejemplar y Cristina libre de polvo y Caixa.