"Entrelíneas": Frases literarias [Contra la fuerza del viento]

Publicado el 17 marzo 2015 por Darkakasha @Alguna_Palabra
¡Hola a todos! En está ocasión comienzo la semana compartiendo con vosotros varias citas de una de mis últimas lecturas: Contra la fuerza del viento de Victoria Álvarez. Normalmente suelo seleccionar una o dos pero esta novela a sido especial. La historia me ha enamorado y la pluma de su autora más todavía. He seleccionado algunos de los pasajes que más me han llamado la atención así que... ¡espero que os gusten! ¿Vosotros habéis leído la novela? Traeré pronto la reseña :)

- Una dama siempre estará preparada para plantar cara a lo que sea- le aseguró, rodeándola con los brazos para compartir el mismo reflejo – mientras lleve puesto algo de encaje. (p. 130)

Aquella fue la primera ocasión en la que se vistió de negro. Pero desde entonces lo siguió haciendo cada día, aunque no fuera más que una prenda suelta, aunque nadie se parara a pensar si estaba de luto por alguien. Y cada vez que lo hacía recordaba todo lo que había sentido durante ese funeral en el que el Dies Irae de Mozart se le clavó en el pecho como un puñal del que nunca se liberaría. No después de haber perdido a su único dios. (p.134)

Oliver se reclinó un momento contra el respaldo de la silla, contemplando a través de una de las ventanas de la biblioteca cómo el sol se elevaba poco a poco en el cielo y el amanecer pintaba de rosa las estanterías de la habitación. Siempre había oído decir a Alexander que cada hombre construye su propia concepción de la historia y que nadie podría decir a ciencia cierta quienes eran los héroes y quiénes los villanos. (p.142)

- Pero la he besado, Stirling – concluyó Lionel en susurros-. Y ese es un tesoro que nadie podrá arrebatarme. Ni siquiera usted. (p.164)

Lo que había entre Will y yo, lo que sigue habiendo pese a que muriera hace casi medio siglo… era amor, amor de verdad. Del que hace que la gente cometa locuras, el que puede salvar o condenar a las almas. Son ustedes demasiado jóvenes para comprenderlo, pero las pasiones de las que se habla en las novelas, los amores eternos… existen, aunque son tan escasos como los tesoros hundidos en el mar. Y por eso tenemos que luchar con todas nuestras fuerzas cuando los encontramos para ser dignos de ellos. (p.474)

LY ahora, señor Saunders, vuelva abajo con la señora Murray y dígale que sí. Dígale que queremos esta casa y que queremos también la vida que nos espera en ella. (p. 517)