Mi sorpresa cuando me enteré de la idea que rondaba por los estudios de Hollywood de realizar este reinicio (o reboot) de la franquicia del hombre araña fue mayúscula. Pese a la crisis reinante de ideas originales en Hollywood me parecía bastante increíble que fueran a rehacer una película filmada hace apenas 10 años. Sin embargo, Hollywood siempre tiene la capacidad de sorprenderme (para bien o, últimamente más, para mal) y así lo hizo nuevamente. Varios meses después la idea era firme y entraba en preproducción.
No es que podamos decir que la película sea una copia de la de Sam Raimi del 2002, ni que sea una mala película, pero sí que es cierto que cuenta la misma historia que la mencionada cambiando al enemigo de Spiderman y al interés romántico de éste. ¿Son estos datos suficientes para volver a intentar relanzar una saga? Desde mi punto de vista, no; desde el punto de vista de los grandes productores de Hollywood, sin duda.
En primer lugar quiero aclarar que tampoco soy un gran fan de las de Raimi, me parecen películas entretenidas y poco más. Al igual que ésta que nos ocupa. Sin embargo las de Raimi tienen una ventaja: fueron rodadas primero, por lo que la sensación de sorpresa era mayor. En ésta nos da la sensación de que hay escenas ya vistas (la muerte del tío Ben, que parece casi por compromiso con el cómic, teniendo mucha menos carga emotiva que en la de Raimi; o el momento de la picadura de la araña, pese a que cambien los motivos de la visita de Peter Parker al laboratorio levemente).
Por otra parte, la acción es una tanto escasa y no está muy bien dosificada, con una escena final a la altura, pero con algún tramo un tanto lento (debido también al hecho de que estamos observando partes de una historia ya conocida). En algunos momentos la acción también resulta un tanto confusa, debido probablemente a que el director de la película, Marc Webb ("(500) días juntos", la serie "Lone Star"), no es un director de películas de acción o grandes blockbusters. Esto también se nota en el excesivo tono romántico que tiene el film en algunas partes, resaltando especialmente la relación de Peter Parker con Gwen Stacy, lo cual ralentiza el desarrollo de la historia, perjudicando al resultado final.