Antxon Caballero es un emprendedor con mucha iniciativa y que en estos momentos tiene dos proyectos en marcha de muy distinto signo, aunque con un origen común. Está siendo asesorado por Secot, teniendo como tutor al senior Juan Alberto González. Con objeto de conocer mejor estos proyectos, le pedimos que nos explique en qué consisten, contestando a unas preguntas.
(Foto de una entrevista el pasado 26 de enero a Juan Alberto Gonzalez y Antxon Caballero en la radio Onda Vasca)
¿Cómo y cuándo se te ocurrió la idea que dio origen a estos proyectos?
Hace dos años empezamos con un proyecto para la identificación de mascotas perdidas llamado TOBBY. Grosso modo, es un chip de identificación el cuál va sujeto al propio collar de la mascota.
En España al año se pierden 200.000 mil mascotas con lo que nos parecía el proyecto perfecto para empezar con HEURISTIK.
¿Me estás diciendo que, la idea de las mascotas, dio origen al nuevo proyecto HEURISTIK?
Efectivamente. Tras validar el interés del mercado nos dimos cuenta de que en España 35.000 pacientes morían por errores de identificación y que esto suponía un enorme coste para las entidades sanitarias. Es por lo que nos dirigimos a validar nuestras hipótesis con las entidades sanitarias.
Efectivamente, tenían un dolor no resuelto y nos dijeron que estaban utilizando brazaletes de identificación con tecnologías semejantes y que no les estaban dando buenos resultados.
¿Qué pensaste entonces para solucionar esa dificultad?
Tras unos días pensando cómo solventar ese problema se me ocurrió implementar biometría para que los profesionales sanitarios pudiesen identificar pacientes con su huella dactilar. Las huellas dactilares son únicas, inequívocas e intransferibles lo que las convierten en la herramienta de identificación perfecta. Nuestra propuesta de valor es ayudar a los trabajadores sanitarios en la identificación de pacientes en situaciones en las que la tarjeta sanitaria o la pulsera identificadora no aportan valor.
¿Nos podías poner un ejemplo práctico?
Sí, por supuesto. Cuando un trabajador de ambulancias encuentra un paciente inconsciente en la calle, en quirófanos para validar la identidad del paciente antes y durante la operación, en las salas postoperatorias para suministrar el tratamiento correspondiente al paciente o en centro de noche y día para identificar a los pacientes que se sienten incómodos portando una pulsera de identificación.
¿Os costó mucho encontrar la solución técnica?
Una vez encontrada la solución perfecta nos pusimos manos a la obra y desarrollamos un producto mínimo viable.
Una vez desarrollado el producto y debidamente testeado ¿Cómo os disteis a conocer?
Con el producto mínimo viable fuimos en búsqueda del socio sanitario perfecto y lo encontramos. Aparte de invertir en la empresa, también son un socio perfecto donde hacer la implementación de nuestra solución. Durante ese periodo, obtuvimos inversión privada de un Business Angel para
compaginarla con la de la DYA y seguir con el desarrollo de nuestra solución.
¿En qué ámbito pensáis desarrollar vuestra actividad?
Hemos recorrido varios países de Europa en procesos de aceleración de Startups entre los que destacan General Electric Healthcare (Budapest), Innovation forum (Bilbao), etc.
¿Cómo entraste en contacto con Secot?
Cuando todavía el proyecto estaba en sus inicios, me di cuenta que la figura de un mentor podría ser útil en el desarrollo de nuestro programa. Para poder contrastar con una persona experimentada las ideas que nos rondaban la cabeza.
¿Qué tipo de relación y ayuda obtuviste de Secot a través de tu tutor?
Al principio Juan Alberto, mi tutor, siempre intenta hacer de abogado del diablo, poniendo en duda todo lo que habías pensado hasta el momento y haciéndote ver una nueva realidad o como él dice “Traerte al planeta tierra”. Creo que todavía seguimos en ese tira y afloja. Pero lo bueno de Juan Alberto es que cuando se apasiona por un proyecto intenta darlo todo por que salga adelante, incluso tener que lidiar con locos como yo de vez en cuando. Sinceramente, creo que el mayor beneficio de tener un mentor son las conversaciones que no puedes mantener con tu entorno.
¿Crees que es interesante y positivo para los emprendedores contactar y recibir el asesoramiento de Secot?
Sin ninguna duda, creo que SECOT es una de las mejores iniciativas que he visto hasta ahora. Por una parte, el asesorado gana la experiencia senior del mentor y el mentor gana manteniendo su cabeza ocupada y aprendiendo de nuevas tecnologías. Con Juan Alberto ya he tenido esta conversación más de una vez, pero algún día me gustaría formar parte de SECOT.
¿Qué recomendarías a futuros emprendedores en este sentido?
Que se dejen asesorar, ellos quizás no saben de tecnología, pero saben del 99% restante del proceso.