Isabel, yo he contado solo una pincelada. Sin desvelar nada que no se deba contar para que todo el mundo lea la novela, ¿qué se van a encontrar todos los lectores de “Shaktarha”?
Los lectores se van a encontrar en un mundo imaginario, situado en algún tiempo remoto, y dividido en dos regiones en conflicto: Luna y Sol. Además de un personaje principal que lleva el peso de la historia, se van a encontrar con otra serie de personajes de las dos regiones, cuyas vidas se entremezclan en un pequeño laberinto de traiciones, leyendas, venganzas, pasiones… Creo que van a encontrar un poco de todo, desde crueles batallas hasta la filosofía espiritual más serena. Por un lado, es una historia entretenida, con muchos ingredientes atractivos, y por otro, es una propuesta más profunda para los que deseen aventurarse un poco más allá.
Sí, de hecho nació en mi última mudanza. Había estado trabajando en otra novela de un tono muy distinto, pero el mismo día en que me trasladaba a otra ciudad se me ocurrió que necesitaba también una historia nueva. La idea fue una novela de aventuras o acción, que tanto yo como los lectores pudiéramos disfrutar mucho, y luego el mismo proyecto me fue guiando hacia una trama más ambiciosa, con mucha más mitología y trasfondo, y así fue como empecé a construir Shaktarha, de Luna y de Sol.
Aventuras, fantasía, amor… pero ¿hay algo más en esta historia que no nos cuentes a simple vista? Habitualmente la Novela Fantástica se usa como escondite para hablar de la realidad…
El mundo de Luna y Sol que encontramos en Shaktarha se puede aplicar a nuestro mundo en general, no necesariamente a una sociedad o época concreta. Se trata de un mundo dividido, azotado por la guerra, los prejuicios, la injusticia, la desigualdad. ¿Resulta familiar? Es también una propuesta de unión a través del amor como única solución para la humanidad. Se trata de descubrir la belleza de nuestra diversidad para empezar a trascender las limitaciones que nos hacen infelices. Al mismo tiempo, esconde una explicación de la conducta humana que se va a desarrollar más profundamente en una continuación en la que ya estoy trabajando.
Eres una apasionada de las lenguas y de las culturas, de hecho, como hemos comentado antes, eres experta en estos ámbitos tanto de la India como de Irán… ¿hay mucho de tus estudios en esta novela? ¿Hacia dónde encaminas este mundo que nos describes y la mitología que lo puebla?
Creo que todo lo que vemos, oímos, experimentamos, leemos y estudiamos a lo largo de nuestra vida va quedando en nosotros, y a la hora de realizar una actividad tan introspectiva como la escritura, volcamos todo ese mundo interior sobre la historia que estamos desarrollando. La mitología me ha fascinado siempre y creo que es un forma muy poética de mostrar lo que se esconde en la mentalidad de cada sociedad. En Shaktarha, de Luna y de Sol, he empleado influencias diversas para crear una mitología propia de ese mundo. De dónde surge o hacia dónde se encamina va más allá de esa mitología y eso es lo que vamos a ir descubriendo a medida que la historia avance.
Me gusta la idea del personaje capaz de terminar de desbaratar todo o de arreglarlo… es una pena que en la realidad no existan este tipo de personajes… Shakbaah, tu protagonista, ¿es un reflejo de esa necesidad de que alguien o algo una a los que están enfrentados en la realidad?
La mayoría de las personas tendemos a dejar la responsabilidad en manos de otro, ya sea un dios, un héroe, un avatar… A la mente humana le encanta la idea del héroe, ese personaje capaz de dar el paso necesario, pero en esta historia se nos explica que todos somos ese héroe de una forma u otra. Se nos cuenta que las personas buscaron la solución a todo en ese avatar sin comprender que ellos también la poseían, y al personaje principal se le dice: “la vida te ha escogido pero tú no eres la única elegida. Nos ha escogido a todos. Cada uno en un color, en una forma, en un destino. Cada historia es una parte del todo y un todo en sí misma. Ninguna es insignificante ni superflua…”. Todos tenemos un papel necesario.
Por cierto, Isabel, creo que la espiritualidad es muy importante en esta novela, ¿hasta qué punto es importante para ti personalmente?
Tal como la propia denominación lo indica, las personas somos seres humanos, es decir “ser” y “humano”. Nuestra historia y nuestra mente están ligadas a esa parte humana, pero somos mucho más que eso, y la espiritualidad es un medio para conocer nuestro “ser”. No sólo es importante, sino esencial. Cuando empezamos a conocernos en esa dimensión, nuestra vida humana cobra un sentido distinto. Es como si empezáramos a alejarnos de lo que siempre hemos tenido delante y pudiéramos verlo en perspectiva. No es una cuestión de doctrina o de religión, en realidad, todo eso pierde importancia.
Hay quien dice que cuando un autor publica una novela, esta deja de ser suya y se convierte en propiedad de los lectores… ¿qué te comentan quienes leen esta novela?
En mi opinión, las novelas y sus personajes tienen vida propia. Los autores sentimos la necesidad de proteger nuestras obras dentro de un contexto práctico y dada la forma en que funciona nuestro mundo, pero a mi parecer las historias no pertenecen ni a los autores ni a los lectores. Lo que sí me hace muy feliz es que esos personajes que he tenido la oportunidad de crear lleguen al corazón de los lectores y de alguna forma se conviertan en parte de sus vidas. Me han comentado sobre la belleza de los pasajes mitológicos o de los diálogos de tono espiritual, y también sobre la intensidad emocional de algunas escenas o la forma en que las diferentes tramas se van enlazando. Y algo que me satisface mucho es que a pesar de ser algo extensa, la novela no se les hace larga y ya esperan la continuación.
¿A qué tipo de lector le recomendarías acercarse a “Shaktarha”? ¿Quién crees que lo va a pasar estupendamente con ella entre sus manos?
Por extraño que suene, Shaktarha no es un novela dirigida especialmente a los amantes del género fantástico. He tenido lectores de edades, sexos o aficiones diferentes que han disfrutado mucho la historia. Creo que contiene ingredientes para muchos tipos de lectores. Yo la recomendaría a cualquier persona dispuesta a sumergirse en una aventura cargada de emociones y a seguir a Shakbaah, personaje principal, en un viaje de descubrimiento a muchos niveles.
¿Y cómo me hago con un ejemplar? ¿Dónde podemos conseguir tu novela?
La novela se puede comprar en versión digital en Amazon, en Kobo y en la editorial, que es Mundopalabras. Las copias en papel se pueden obtener también en Mundopalabras o en librerías del grupo Cegal.
En mi sitio web www.isabelforga.com se encuentra toda la información sobre esta novela y también sobre otros libros anteriores, así como mi blog “El rincón de Zykbar”, que os invito a visitar.
¿Qué te gustaría dejar en todos los que se acerquen hasta esta historia? ¿Qué ideas o sensaciones al terminar de leerla?
Es una pregunta muy bonita que creo que no me habían hecho aún. En primer lugar, claro, me gustaría que disfrutaran la novela y se quedaran con ganas de más. También me haría muy feliz que la recordaran. Son tantas las historias que llegan a nosotros hoy día en tantos formatos que es fácil que muchas queden en el olvido. Finalmente, me encantaría que mi novela contribuyera, aunque sea de manera ínfima, a ese cambio de conciencia tan necesario para la humanidad hacia una unidad que nos ayude a comprender la diversidad como riqueza y no como algo negativo.