Si Occidente aparece como el modelo de civilización, ¿cómo es que se ha desentendido de su propia barbarie producida? ¿Dónde estaba el Derecho, la criminología cuando ocurrían estas catástrofes humanas?El libro llama la atención acerca de la naturalidad con la que distintas narrativas acerca de la cuestión criminal, entre ellas las distintas ramas del derecho y la propia criminología, dejaron de lado el acontecer de un sinnúmero de genocidios y masacres en todo el mundo desde la colonización Belga del Congo en 1885 hasta la matanza de los Tutsis en Ruanda en 1994. A pesar de la muerte de cientos de millones de personas las formas jurídicas se rebelaron incapaces de controlar la violencia colectiva de los Estados colonizadores y sus políticas imperiales.
¿Cómo hacer presente esa memoria de la barbarie en una conciencia global actual?
Como recuerda el autor, si al mirar hacia el pasado en busca de guía, vemos luchas y sufrimiento, también podemos ver hechos edificantes e inspiradores, que nos permitan develar las atrocidades del poder y limitar el avance de las prácticas genocidas alrededor del mundo.