Entrevista a Wendy Davies, autoras de "Recuerda que me quieres", "Una estrella en mi jardín" e "Instant Karma"

Publicado el 04 abril 2016 por Adriana M. @92libros

*Entrevista realizada con Lorenna, de "Los libros de Lorenna"*

Bajo el pseudónimo de Wendy Davies se esconden dos chicas, Fátima y Merche, las autoras de Recuerda que me quieres, Una estrella en mi jardín e Instant Karma, esta última recientemente publicada por el sello “Suma de letras”. Y la primera pregunta seguramente os la hayan hecho muchas veces pero es casi obligatoria, ¿por qué “Wendy Davies”?

Wendy Davies: Wendy Davies es el nombre de la protagonista de Recuerda que me quieres, una chica cuyo sueño es ser escritora y que hace todo lo que está a su alcance para conseguirlo. Wendy no se rinde. Se enfrenta a sus sueños como se enfrenta a la vida, sabiendo que algunas veces se gana y otras se pierde. Y pese a los riesgos, apuesta por sus sueños una y otra vez. Decidimos usar su nombre como pseudónimo porque nos pareció bonita la idea de recordar que al final lo consiguió, como si todos nuestros libros fueran los que ella escribió a partir de entonces. Es nuestra manera de darle las gracias a Recuerda que me quieres, porque gracias a él estamos hoy aquí.
Encontrarnos con libros escritos por dos o más personas no es muy común, aunque hay varias parejas de autores bastante conocidas, sobretodo en literatura juvenil... ¿cómo os conocisteis? ¿cómo surgió la idea de empezar a escribir juntas?

Wendy Davies: Nos conocimos gracias a los libros. Ambas administramos un blog literario desde hace más de seis años y solíamos leer y comentar las reseñas de la otra. Pero no fue hasta que cierta editorial organizó un reto literario para promocionar un libro cuando decidimos dejar de ser simples lectoras y convertirnos en cazadoras de sueños, de historias. Perdimos el reto literario, pero nos quedamos con Wendy Davies y la magia de Peter Pan.  
A la hora de escribir con otra persona seguramente lo más importante es la confianza y conocerse muy bien. Nos parece difícil tener una idea y que la otra persona esté de acuerdo y entienda “por dónde van los tiros”... ¿Vosotras cómo lo hacéis? ¿Os dividís el trabajo y cada una se encarga de una parte o en cambio hacéis todo juntas?

Wendy Davies: Efectivamente, lo más importante para nosotras siempre ha sido la comunicación y la sinceridad. Nunca nos cansaremos de decir que no somos dos chicas que escriben juntas, ni siquiera somos amigas; somos familia. Y eso requiere un nivel de cercanía que a veces resulta abrumador.

Somos dos personas muy distintas, con gustos distintos y pensamientos distintos, y eso hace que escribir juntas sea un reto todavía mayor. Pasamos muchas horas hablando por teléfono, por Skype, Facebook o Whatsapp. Sacamos todas las ideas que tenemos y las dejamos sobre la mesa para luego ordenarlas y unificarlas, hacer de todas ellas algo común, algo con lo que sentirnos identificadas las dos sin perder la esencia de cada una.

Una vez tenemos clara la idea, el inicio, nudo y desenlace de la historia, pasamos a hacer resúmenes y fichas de personajes. Y una vez hecho esto lo siguiente es elaborar una escaleta, que consiste básicamente en hacer pequeños resúmenes orientativos sobre lo que tiene que ocurrir en cada capítulo para que la trama avance. A partir de ahí, escribimos.

Nunca nos repartimos personajes, es más, es obligatorio que las dos toquemos a todos los personajes. Cada vez que una escribe un capítulo nos lo tomamos como un borrador e inmediatamente la otra escribe encima, y la primera se lo vuelve a mirar y hacer los cambios que crea oportunos. El reto de escribir a cuatro manos es que no se note, acabar difuminadas entre todas las palabras.
¿Qué sentisteis cuando os dijeron que vuestro sueño se hacía realidad y que iban a publicar vuestro primer libro?

Wendy Davies: Nuestro sueño no era publicarlo, nuestro sueño era escribirlo. Todo lo demás vino después. Todavía hay veces en las que cuando vemos uno de nuestros libros en una librería o alguien los reseña o nos dice lo que le ha parecido no acabamos de creérnoslo.
Si algo os caracteriza, es crear historias sobre otros cuentos muy conocidos, lo que se podría llamar “retellings”… Peter Pan, Alicia en el País de las Maravillas,¿por qué escribir sobre estos en concreto? ¿Son libros especiales para vosotras? ¿Qué tienen vuestras novelas que las diferencien de los cuentos originales?

Wendy Davies:Peter Pan, Alicia en el País de las Maravillas o El Principito son libros con los que crecimos, libros que nos han dado las alas, que alimentaron nuestro amor por la literatura. Si tuviéramos que explicar de dónde somos, diríamos que Merche es de Nunca Jamás y Fátima del País de las Maravillas. Estos libros han marcado nuestra vida como lectoras y, por tanto, más que hacer un retelling queríamos darles las gracias a esas historias sin las cuales no nos habríamos conocido ni habríamos escrito una novela.

Más que hacer retellings lo que hacemos es homenajear, convertir esas historias en el polvo de hadas, en el hilo conductor, para contar otra historia muy distinta. Somos lo que hemos leído y cuando escribimos no nos apetece ocultarlo.
Como os preguntamos sobre los retellings antes, si nos centramos en Instant Karma vemos bastantes referencias a un libro que todos hemos leído y a muchos nos ha marcado, ¿es un retelling de El Principito como dicen muchos, o simplemente habéis querido que sea un personaje más?

Wendy Davies: No, no es exactamente un retelling. Cuando empezamos a dar forma a la idea de lo que sería Instant Karma, lo único que teníamos claro era que queríamos contar la historia de un chico que daba la casualidad de que es —o tiene— Asperger pero sin que el Asperger lo dominase todo. Entonces nos vino a la mente aquella historia del niño que vivía en otro planeta, que cuidaba de su rosa pese a que esta ni siquiera se esforzase por entenderlo. Un niño que nunca renunciaba a una pregunta, que no entendía al mundo ni a la gente que lo rodeaba. Y tuvimos claro que Rin sería como ese niño. El Principito lo conecta todo, pero no es lo esencial.
Centrándonos en Instant Karma, primero querríamos preguntar por el título, ¿cómo os vino a la mente? ¿Es un pequeño homenaje a John Lennon?

Wendy Davies: A diferencia de lo que nos suele ocurrir, el título de esta novela fue lo primero que tuvimos claro. Via, la coprotagonista de la historia, es una fan incondicional de John Lennon y de los Beatles. Y no solo eso, sino que, además, cree fervientemente que el karma la odia. John Lennon compuso Instant Karma en el desayuno, la grabó a la hora de la comida y la editó durante la cena. Esa necesidad de contar, de arrancarte de las entrañas una historia —ya sea novela o canción—, de no poder parar hasta sacarlo de dentro es lo que nos pasó con Instant Karma. Nosotras no la escribimos en un día, pero de haber sido posible lo habríamos hecho; necesitábamos contar esta historia.  
Cuando estábamos leyendo vuestro último libro, notamos mucha diferencia con los demás, quizá más mimo a los personajes... ¿creéis que este libro es una muestra de vuestra evolución como escritoras?

Wendy Davies: Nunca se termina de aprender a escribir, es como una carrera de fondo. Cada día aprendes algo nuevo y te das cuenta de cosas que antes hacías mal. Es normal. Por eso no nos gusta la palabra «escritoras». ¿Qué es un escritor? ¿Alguien que escribe? ¿O que escribe y publica? ¿Cuántos libros tiene que escribir o publicar alguien para considerarse escritor? ¿Solo uno? ¿Dos? ¿Si escribes y publicas un libro y ya nunca más vuelves a hacerlo sigues siendo escritor? Nosotras somos lectoras, buscadoras de historias, y nunca perdemos de vista el hecho de que escribimos para leer. Es más, algunas veces nos hemos llegado a pasar quince horas seguidas escribiendo solo porque necesitábamos saber lo que iba a ocurrir —lo cual resulta extraño cuando la que estás escribiendo eres tú—. Pero si hay algo que tenemos claro, es que queremos mejorar. Y eso precisamente es lo que intentamos hacer con cada novela. Que sea mejor que la anterior.

A escribir se aprende escribiendo. Con Instant Karma nos preocupamos mucho en no cometer los errores pasados, cambiamos, borramos y nos metimos en la piel de Rin y Via dejando un pedazo de nosotras mismas en ellos. Y dolió. Mucho. Es una novela que nos dejó vacías y con esa sensación de no saber qué hacer a continuación, como si no tuviéramos nada más que contar. Evidentemente, ya nos hemos recuperado de ello, pero estamos inmensamente orgullosas del resultado. Dentro de Instant Karma se ha quedado una parte de nosotras.
Quizá es una pregunta que ya os han hecho mucho pero, ¿podríais decirnos qué os inspiró a crear a uno de los protagonistas con Asperger? ¿Recibisteis alguna ayuda para crear al personaje?

Wendy Davies: Escribimos sobre el Asperger como una manera de domar a nuestros monstruos. Es un tema que toca muy de cerca a Merche y, por ello, habíamos leído y visto muchísimo acerca del tema y también habíamos preguntado a profesionales, intentando entender algo que quizá nunca se podrá entender. Como hemos comentado anteriormente, no queríamos que el Asperger lo abarcara todo a la hora de contar la historia de Rin, pero sí que queríamos reflejar cómo se siente y vive una persona con Asperger, cómo afecta a su entorno, a su familia, a sus amigos, a las personas que entran y salen de su vida o que simplemente pasan por ahí. Pero no creemos que lo importante de Instant Karma sea el Asperger; de hecho, que no figure en la sinopsis es totalmente meditado. Instant Karma es una novela sobre ser diferente, sobre no tener miedo a ser quien eres y en la que intentamos descubrir qué es la normalidad y por qué tanta gente se olvida de sí misma por ello.
Hablando de Asperger, un día llegamos a la pregunta que muchos se hacen “¿se es Asperger o se tiene Asperger?” en este libro se ve cómo mimáis a Rin y lográis conseguir que se vea el día a día de mucha gente y, por ejemplo, vuestro protagonista tiene un amigo fiel que siempre ha estado a su lado, o a Via, que no es capaz de creer que tenga una enfermedad... ¿Por qué creéis que la gente sigue usando el ES ASPERGER como si la enfermedad marcara su vida?

Wendy Davies: Es la eterna pregunta. ¿Se es o se tiene Asperger? Con Instant Karma también queríamos responder y al mismo tiempo plantearos a vosotros la pregunta. En un momento de la novela Diana, la madre de Rin, le dice «Hay una gran diferencia entre ser y tener. Todo lo que no puedes cambiar es lo que eres y todo lo que es elección tuya es lo que tienes». Quizá tenga razón o quizá no. La cuestión es que —y citando a El Principito—, a las personas grandes les encantan las etiquetas. Todo lo que sea diferente, lo que se salga de la norma establecida por la sociedad, debe estar etiquetado. Así no hay confusiones, así nadie lo olvida, así diferenciamos lo que es normal y lo que no. Como si la normalidad existiera. Rin está etiquetado como diferente, como Asperger, como lo están otras tantas personas.
Para vosotras, ¿qué libro de los tres que tenéis publicados es el más especial? Y de todos los personajes que habéis creado, ¿cuál es vuestro favorito?

Wendy Davies:Instant Karma, sin duda. Es la novela de la que más orgullosas estamos, la que más ha dolido, como duele el alcohol que cura una herida. Y de todos nuestros personajes, también nos quedamos con Rin. Por su humanidad, su brutal sinceridad y su inocencia a la hora de ver, entender y enfrentarse al mundo.
Muchos autores a la hora de crear sus novelas cogen parte de sí y la reparten por los protagonistas, ¿qué personaje de vuestros libros tiene más de vosotras?

Wendy Davies: Todos los personajes siempre tienen parte de las dos, porque es inevitable, pero también tenemos claro que escribimos para descubrir. No tiene sentido que un personaje se parezca a ti, que crea en lo que tú creas, que le gusten las mismas cosas que a ti…sería muy aburrido. Lo divertido es enfrentarte a lo desconocido, que sea un reto. Ni siquiera tienen por qué caerte bien. Son como son y tú eres como eres. Y sí, puede que tengan pequeñas cosas de nosotras —como esa obsesión de Via por el karma que es idéntica a la que tiene Merche o eso que le sucede a Rin de sentirse fuera de lugar cuando no pilla las indirectas o los chistes, que le sucede a Fátima—, y que también guarden parte de nuestros miedos, pero nunca serán como nosotras.

Hoy en día vemos cómo muchos autores acuden a Amazon u otras plataformas similares para poder publicar sus libros, ¿vosotras habéis pensado alguna vez en autopublicar?

Wendy Davies: Cuando terminamos de escribir nuestra primera novela no teníamos claro si alguna editorial se interesaría por ella, lo que sí sabíamos es que queríamos que se leyera. Al final nos la publicaron y, desde entonces, nunca nos hemos visto en la situación de tener una novela terminada sin editorial, de modo que la opción de autopublicar no se nos ha presentado. Sin embargo, no descartamos la idea de subir algún relato/novela corta algún día como regalo para nuestros lectores. Porque a fin de cuentas lo que importa de todo esto es compartir, que llegue, que lean, que crean en nuestros personajes como nosotras creemos en ellos.
Vosotras, además de escritoras, también sois blogueras desde hace varios años y conocéis bastante este mundillo… ¿qué papel creéis que juega el bloguero hoy en día? ¿Pensáis que se han convertido en una pieza fundamental tanto para las editoriales como para los autores?

Wendy Davies: Todo lo que sea “feedback” entre lector/escritor/libro es algo sumamente positivo, bien sea mediante blogs o plataformas como Goodreads, Youtube u otras redes sociales. Puede que no todo el mundo utilice Internet, hay muchísima gente que todavía actúa según la vieja usanza: ir directamente a la librería y buscar entre los estantes. Es bonito, nosotras todavía lo hacemos. Pero está claro que ha habido un cambio. Hay demasiadas novedades mensuales y es imposible abarcarlo todo. Lo más fácil para decidirnos es buscar opiniones en Internet de lectores con gustos afines a los nuestros, y las editoriales se han dado cuenta de que esta es una manera de publicitar los libros tan buena como cualquier otra.
¿Os inspiráis en algún autor/autora en concreto a la hora de escribir? ¿Tenéis algún ritual o alguna manía cuando os ponéis a escribir? ¿Y qué hacéis si la inspiración os falla?

Wendy Davies: Nos inspiramos en muchas cosas a la hora de escribir. En lo que leemos, sea del género que sea, en las películas que vemos o en la música que escuchamos, incluso una conversación casual puede ser una fuente de inspiración. Pero no, no tenemos ningún autor en el que nos inspiremos. Más que autores favoritos tenemos libros favoritos.

Una de las ventajas de escribir a cuatro manos es que cuando a una le falla la inspiración siempre queda otra que coge el timón y continúa avanzando. A veces nos pasamos semanas sin escribir, simplemente porque necesitamos descansar, desconectar y hacer otras cosas. Es perfectamente normal. Pero bloquearnos en medio de una novela todavía no nos ha pasado. Sí, siempre llegamos a ese punto en el que todo nos parece una mierda (¡eso también es normal!), pero con el apoyo de la otra normalmente conseguimos salir adelante. Si a una no le sale un capítulo la otra se encarga de escribirlo/reescribirlo o incluso lo escribimos juntas por medio de Google Docs.


Hay muchos autores que pese a haber publicado decenas de libros y ser “best-sellers”, los días previos a la publicación de su nuevo libro están muy nerviosos pensando que puede que ese libro no guste o repasando cosas de la trama que les gustaría cambiar en el último momento… ¿vosotras cómo vivís esos días previos? ¿seguís estando igual de nerviosas que el primer día o ya la experiencia os hace estar más tranquilas?

Wendy Davies: Al igual que nunca aprendes a escribir, nunca terminas de corregir un libro. Incluso cuando está en las mesas de las librerías hay algo que seguramente cambiarías, aunque ese algo sea una coma. Para nosotras lo importante es ser humildes, poder encajar las opiniones y aprender de ellas.

Los días previos a la publicación de una novela son tan extraños como la primera semana en que comienzan a llegarte opiniones de los lectores. Estás como en una burbuja. No existes. Lees opiniones y abres el libro buscando ese capítulo por donde van, releyendo escenas, emocionándote. Realmente nos exponemos en nuestros libros y cuando alguien lo lee no puedes evitar sentir la sensación de que lo que tiene entre sus manos no es solo una novela, también es una parte de ti.  
¿Cuál es ese libro que siempre recomendáis?

Wendy Davies: Para no ser repetitivas y nombrar uno que solemos recomendar las dos, nos quedamos con El Principito. Es un libro que no solo cambia con cada lectura sino que también te cambia, que consigue dejarte con cientos de preguntas y un nudo en el estómago. Siempre hemos pensado que los mejores libros son los que al terminarlos te dejan planteándotelo todo, intentando resolver preguntas que ni siquiera te habías planteado, y eso es sencillamente maravilloso.
¿Estáis trabajando en algún nuevo proyecto?

Wendy Davies: Actualmente estamos en la recta final de una trilogía en la que cambiamos totalmente de registro. Se trata de una trilogía New Adult que está siendo todo un reto para nosotras por la cantidad de personajes y temas tan diversos que tratamos. Al ser una trilogía hemos tenido más tiempo para acompañar a nuestros personajes en este viaje, lo que ha hecho que experimentemos un sinfín de emociones conforme ha ido avanzando la historia y los personajes han ido creciendo y evolucionando con ella. Pasamos de la risa al llanto, del amor al odio, de la felicidad a la rabia. Un poco como vivir, quizá. ¡Estamos deseando que los conozcáis!
¿Qué consejos les daríais a esas miles de personas cuyo sueño es publicar algún día su propia historia?

Wendy Davies: Nunca dejéis de leer, de buscar y de creer. El primer paso para que un sueño se cumpla es precisamente eso: soñarlo. Leed de todo, incluso géneros que normalmente no leeríais. A escribir se aprende escribiendo, sí, pero también leyendo mucho. No olvidéis que nunca se termina de aprender a escribir, que es un aprendizaje constante. Creed en vuestra historia, pero sed capaces también de verla como simples lectores, que no os tiemble el pulso a la hora de cambiar cosas o borrarlas. No tengáis miedo de que otros la lean y opinen. Pedid críticas sinceras a varias personas y no os neguéis a la posibilidad de arreglar algo solo porque no estáis de acuerdo. Antes de publicar, lo principal es escribir y terminar una historia de la que te sientas orgulloso. Luego es jugarte las cartas y esperar. Tened paciencia y no os rindáis. Los sueños se cumplen, y que estemos aquí es un ejemplo de ello. Muchas gracias por concedernos esta entrevista chicas... ¡esperamos impacientes vuestra próxima publicación!

¡Mil gracias a vosotros por invitarnos y leernos!





Esta entrevista está incluida en el número de marzo de la Revista digital "Comentamos". Si quieres ver el resto de la revista pincha aquí.