Pregunta: ¿Ha sido difícil el salto de la poesía a la novela?Respuesta: Siempre es difícil adentrarse en un género nuevo, pero reconozco que gracias al bagaje que me ha dado la escritura en poesía y teatro; me he sentido con los instrumentos necesarios como para irrumpir en este género y que eso no me llevase a mi propio suicidio literario.
P.: En qué género te sientes más cómoda?R.: Efectivamente, la poesía es el género que más controlo porque lleva conviviendo conmigo toda la adolescencia y sigue en mi camino. Sin embargo, tras realizar los estudios de arte dramático e iniciarme con los textos teatrales; me di cuenta que era un género donde podía experimentar tanto como la protagonista de Salvaje Intimidad en la vida.
¿Te atreves a desvelar el secreto que se esconde en Salvaje Intimidad?
Foto: MJ Carmona
P.: Parejas abiertas, pansexualidad, amor sin edad, sexo sin compromiso... ¿estamos preparados para este tipo de pasiones o sigue habiendo tabús en las relaciones hoy en día?R.: Yo creo que tabúes habrá siempre, por mucho que nos pese, y más para la mujer. La cuestión es si está funcionando o no la fórmula de la monogamia en nuestro país y frente a eso, que otras posibilidades existen. El ser humano tiene la capacidad de elegir. Una capacidad que se extiende a todos los ámbitos, incluido el amoroso y el puramente sexual; así que cada uno profundiza en su intimidad más salvaje al nivel que decide libremente. Desde luego, es cierto que no todos estamos preparados para adentrarnos en ciertas fórmulas de relación que suponen una gran madurez psicológica.
Les invito a entrar en un mundo de oscuros y pasionales laberintos. No se queden a las puertas. Dejen la cobardía fuera y descubran al animal salvaje que les habita. Olviden la moral y naveguen en una historia de lujuria y anhelos, de amor y trepidante locura. No sean tímidos: acompañen a la protagonista en un viaje de ida y vuelta hacia sí misma. La experimentación y el placer acaban de llegar para quedarse. Pasen, mis fieles y lascivos invitados. ¿Quién dijo que Eva no podría volver al paraíso?
P.: ¿Por qué crees que se ha producido este auge en la novela romántica en los últimos años?R.: La novela romántica siempre ha existido porque la literatura nos educó en ese amor cortés de romance eterno y final feliz. Actualmente, ha habido una eclosión de rupturas emocionales. Un gran porcentaje de las relaciones amorosas se ven abocadas al desastre y frente a eso, existe un ser humano-lector que vive con la esperanza de que el amor se base en una gran y absoluta verdad.Quizá necesitamos leer y fantasear con que esa forma de amor existe aún, soñar con que ciertamente es una realidad y por eso seguimos leyendo novelas románticas. Nos emocionamos con historias escritas, que de alguna forma, son en nuestro fuero interno una luz de esperanza en el amor.
P.: ¿Es complicado escribir este género sin caer en lo soez?R.: Sí y no. Por un lado, es complicado porque al final las escenas te piden el uso de cierta terminología que te empuja a caer en las fauces de una escritora más directa y ordinaria. Sin embargo, yo tenía claro que lo soez no podía salpicar las páginas de mi novela. Al final, siempre prefiero la sensualidad con elegancia, pero sin privar al lector del lado salvaje de una historia escrita también para transmitir un erotismo palpitante y vital.
La novela ha sido editada por Círculo Rojo.
P.: ¿Cuál ha sido el personaje más complicado en esta novela? R.: Sin duda, la protagonista Ángela y el personaje de Roberto. Por un lado, quería que Ángela fuese un personaje de carne y hueso, con todas las fortalezas y debilidades que cualquiera de nosotras puede tener. Quería construir a una mujer que camina por la vida por derecho y pisa fuerte, pero sin dejar de lado sus propios miedos y temores. Buscaba a una mujer que se hiciera preguntas y se atreviera a contestarlas sin medias tintas. Ángela eres tú, es ella, somos todas nosotras posicionadas en la valentía de soltar las ataduras morales y vivir la vida con la intensidad de saber que sólo tenemos una oportunidad.En cuanto a Roberto, fue un personaje que fue cambiando conforme avanzaba la trama. Primero, lo creé como el típico galán interesante del que cualquier mujer se podría enamorar con facilidad. Pero conforme iban pasando los capítulos, iba tomando matices oscuros y temerarios. Me permitía crear intrigas que ni siquiera me había planteado. Era un personaje con luces y también con unas sombras muy fuertes. De ahí, la complejidad para buscar ese equilibrio.P.: ¿Cuáles son tus miedos ante el papel en blanco? R.: Mi principal miedo es cuando no consigo encontrar una idea explosiva que me convenza lo suficiente como para arrancar una historia. Yo necesito una sacudida de inspiración potente que me haga escribir con la pasión y el entusiasmo necesario. Necesito creer ciegamente en la idea para poder desarrollarla con calidad suficiente.
Para vencerlo no hay ninguna fórmula mágica, si no tener paciencia para que esa idea llegue. Reconozco que a veces la música me inspira y me lleva a sumergirme en estados anímicos que me permiten escribir en un sentido determinado; para la poesía sobre todo. Incluso, asistir a espectáculos, museos, performance y demás eventos me inspiran en el propio proceso creativo.
"Necesito creer ciegamente en la idea
para poder desarrollarla."
P.: ¿Qué te depara este nuevo año? R.: Por supuesto, ahora estoy en plena promoción de Salvaje Intimidad. Intento que pueda llegar a todo tipo de lector y que precisamente, el hecho de no tener un nombre destacado en la literatura no sea un hándicap para que todo el mundo pueda acceder a la novela y pueda comprobar personalmente que se trata de una novela erótica con una calidad literaria superior a lo que hay en el mercado en este género. Personalmente, este título ha sido un compromiso como escritora por entregar a los lectores una historia real, sugerente, provocadora y que engancha desde la primera página. Una historia de verdad que nos lleva en un viaje de ida y vuelta hacia nuestro lado salvaje.
Igualmente, quiero seguir trabajando en textos teatrales en los que además participo en las labores de interpretación puesto que también soy actriz. La idea es adentrarme paso a paso en el engranaje audiovisual de la capital. Ahora vivo en Madrid y desde esta cuna del arte me gustaría poner en marcha muchos proyectos creativos que fusionen distintas disciplinas artísticas. En definitiva, seguir aventurándome en el continuo camino de la creación.
Una prometedora carrera en el mundo de las artes que nos ofrecerá una gran sensibilidad desde cualquiera de las vertientes artísticas en las que Carmen Moral centre su trabajo. Mientras tanto, los lectores pueden atreverse a descubrir esa pasión que ofrece la autora desde Salvaje Intimidad, siempre que guarden el secreto...