Entrevista con François Pérez Ayrault, autor de "Anochecer en El Puerto"

Por Jessicaolivares
Estos días he tenido el placer de conocer (virtualmente) a François Pérez Ayrault, quien fue muy amable al enviarme una copia de su novela Anochecer en El Puerto para que pudiera leerla. François, director comercial natural de Madrid, publica por primera vez con Infova Ediciones, dentro de la colección Holo Narrativa.  Aquí os dejo algunas preguntas que tuvo la amabilidad de responder para este blog.  -  Anochecer en El Puerto es tu primera novela. ¿Qué te llevó a escribirla?-   La inquietud de escribir. Llevaba varios años deseando plasmar sobre el papel el deseo de emocionar, en este caso desde el humor. Ahora bien, “Anochecer en El Puerto” es mi primera novela publicada, pero no mi primera novela escrita. Estoy ahora revisando, con la perspectiva de la experiencia y el aprendizaje de estos años, este primer escrito que no guarda ninguna relación con “Anochecer en El Puerto”, es una novela más íntima, con un registro más dramático. -   ¿Por qué sobre vampiros y por qué la figura de Vlad Tepes? -   La literatura de vampiros tiene una fascinación propia que la hace muy atractiva. La figura de Vlad Tepes, en sus aspectos literarios, representa mejor que nadie la naturaleza del mal. No quiero entrar en la valoración histórica del personaje, sino en la conversión al mal que tan magistralmente expone Bram Stoker en Drácula. La literatura es conflicto y quería combinar un conflicto ancestral con unos personajes ciertamente grotescos enfrentados a un antagonista de proporciones épicas como Drácula. -  Martínez y Manteca, los protagonistas, resultan bastante torpes y patéticos. ¿Salen airosos de situaciones tan peliagudas por pura casualidad, o realmente hay algo sobrenatural en ellos?-   “Prefiero los malvados a los imbéciles. Aquellos, al menos, dejan un respiro”. Se atribuye a Alejandro Dumas esta frase que se explica por sí misma. La mención a lo sobrenatural tiene que ver más con las devastadoras consecuencias de la estupidez. En “Anochecer en El Puerto”, la estupidez gana por goleada al mal absoluto. Esa es precisamente la paradoja del libro. -  La novela está dedicada a sir Arthur Conan Doyle, ¿por qué? -   Soy sordo, y aunque tengo corregida la sordera con audífonos, siendo niño tendía a la misantropía y me relacionaba poco con otros chavales. Así, era una niño más solitario, retraído y poco comunicativo. Y en esas circunstancias mi mayor afición era leer. Más o menos, con doce años, leí “El perro de los Baskerville”, y aquella lectura me zambulló por completo en la literatura con mayúsculas. De hecho, releo “El perro de los Baskerville” como un mantra cada año, o año y medio, para conectarme con aquel chaval y recordar la pasión con que me enganchó. La novela está dedicada a Sir Arthur Conan Doyle por la misma razón que se la dedico en el libro, por gratitud.-   ¿Qué autores crees que te han influido como escritor? -   Creo que es imposible no influir, del mismo modo que es imposible no comunicar. Todo lo que leo me influye, y en este aspecto soy muy permeable. Ahora bien, si tuviera que decirte escritores sobre los que he notado más su influencia respecto de otros, te diría que Arthur Conan Doyle, Eduardo Mendoza, los grandes de la novela negra como Dashiell Hammett, Chandler, Woody Allen en su faceta de escritor, y lo mismo con Groucho Marx; pero debo decirte que como lector mis gustos son muy amplios y diversos, y he disfrutado mucho de la lectura de “Ulises” de Joyce, de los grandes clásicos como Víctor Hugo, como de los best Sellers de John Grisham o Clive Cussler.-   ¿Cuáles son tu escritor y novela favoritos? -   Antes te contaba mi relación con “El perro de los Baskerville” y su autor, Conan Doyle, a quien va dedicada. Pero tu pregunta, entiendo que tiene que ver con la globalidad de mi experiencia lectora hasta hoy.Mi novela favorita es “El Quijote”, fíjate que fue una obra con la que me costó mucho conectarme. Intenté leerla en el colegio como parte de las lecturas obligadas y no pasé del primer capítulo donde se pone de manifiesto su locura. Lo intenté, por mi cuenta cerca de los veinte años, y llegué hasta la aventura con el vizcaíno, pero no logré engancharme. A los treinta y cinco o treinta seis años lo intenté de nuevo, y además en una etapa difícil de mi vida, y la conexión fue total. Es la obra cumbre por excelencia, una novela perfecta, con una segunda parte que hace aún pequeña a la primera. El maravilloso compendio de humor, aventuras, cinismo, locura y amor, se entronca con una disquisición sobre los principios y valores con momentos tan irrepetibles que aún recuerdo su lectura de aquel entonces con gran emoción. Dos de los discursos tan brillantes de “El Quijote” me cautivaron tanto que determinaron mi vida más allá de lo que yo mismo alcanzo a comprender: el de la libertad, y el discurso sobre el buen gobierno que le dedica a Sancho cuando este cree que va a ser gobernador de la ínsula Barataria.Me parece una obra única cuya lectura nunca debería ser obligada, pero sí recomendada hasta la saciedad, pues creo que cada lector debe encontrar su momento.-   ¿En qué sitio te sientes cómodo para escribir? -   Soy flexible. He escrito en el AVE, en hoteles, en el salón de casa, en el dormitorio, en cafeterías. A veces, necesito estar sólo y escuchar música. Lo hago por géneros:Heavy metal (especialmente Epic Metal, clásica, AOR, blues, country, rock sureño, sinfónico, depende. Y a veces necesito la máxima concentración y silencio, algo que consigo con sólo quitarme los audífonos de ahí que pueda escribir en cualquier parte.-   ¿Estás trabajando en alguna nueva novela? Si es así, ¿puedes avanzarnos algo? -   Acabo de terminar el guión de un largometraje,que provisionalmente se titula “El expolio,” una trama que trata de un grupo de jubilados que, inesperadamente, ven sacudidas sus tranquilas y rutinarias vidas, cuando uno de ellos casi pierde a su hijo, periodista, que hacía un reportaje sobre el Maquis en Galicia, y que topa con la pista de un contenedor de obras de arte procedentes del expolio nazi a los judíos, y que al parecer lleva escondido en algún lugar de Galicia desde hace más de sesenta años. Ahora estoy escribiendo las segundas aventuras de Manteca y Martínez, y como te contaba antes, estoy revisando y actualizando la primera novela que escribí.-   Para finalizar, dinos ¿Qué crees que puede esperar el lector de Anochecer en el puerto?-   Un buen rato, distensión, humor, entretenimiento y un par de sustos. La pretensión de “Anochecer en El Puerto” es ofrecer un momento de relax, un paréntesis en estos tiempos difíciles, y también, un momento para encontrar en esos personajes tan caóticos el reflejo de nuestras propias limitaciones con las que tan difícil resulta conectarnos, pero que tantas alegrías nos darían si fuéramos capaces de integrarlas, aceptarlas, y superarlas.     Sobre Anochecer en El Puerto  
  Anochecer en El Puerto es una comedia repleta de vampiros en la que los protagonistas, Martínez y Manteca, se topan con uno de los personajes más temidos de todos los tiempos: Vlad Tepes, también conocido como Drácula. Debido a una serie de extrañas circunstancias y casualidades, estos dos investigadores privados de poca monta se verán envueltos en una aventura épica, llena de situaciones cómicas, ridículas y absurdas pero también muy peligrosas. Sin duda, esta será la misión más importante de sus vidas.  Con un principio aterrador que no nos dejará indiferentes, el autor logra captar nuestra atención magistralmente, provocando que nos enganchemos desde la primera página hasta la última.