-¿Qué tendría que hacer la comunidad internacional para que se acabaran los conflictos relacionados con los minerales de sangre?
En primer lugar hacer una moratoria y no aceptar coltan de la República Democrática del Congo donde se extrae el 80% de todo el mineral, hasta que todas las minas no hayan sido inspeccionadas por personas independientes sin previo aviso. En las minas es muy difícil entrar para ver lo que hay y los pocos medios que han podido entrar, han tenido muchas dificultades y tras largas horas han accedido, tiempo suficiente para sacar a los menores de edad de la zona.
Además de todo ello, hay un tráfico ilegal de coltan en ese país que no es supervisado por nadie y que entra en la ruta del comercio internacional, a cambio muchas veces de armas para que las guerrillas puedan surtirse y sigan con la explotación de este mineral a base de esclavos humanos.
Además se debería de inmediato apoyar de forma contundente el reciclado de todos los aparatos que contenga coltan y que son inservibles para poder reutilizarlos nuevamente. Millones de móviles dejan de usarse en un año de forma continuada.
Pienso que ninguna. Hay muchos mecanismos para blanquear el coltan, como lo hay para el dinero. Las multinacionales siempre van a optar por lo económico para sacar rendimiento y si no se toman medidas drásticas de control, todo seguirá igual. Hay mucho negocio en juego. Pasa igual que con el Biodiesel procedente de las plantaciones de palma de aceite. Se destruye las selvas para plantar Palma de Aceite y asi obtener el biocombustible cuyo producto es enviado a otro país para su elaboración y de allí la venta ya blanqueada a los países que solicitan el Biodiesel.
La problemática esta en el propio país que permite la explotación abusiva y sin control de las minas, con un secretismo y protección que puede estar al borde de ser considerado un crimen de lesa humanidad. También en las multinacionales que sin escrúpulos compran el coltan sin importarles las vidas y la situación en que viven los “mineros de la muerte”. Y por último de los países receptores del coltán, los llamados “industrializados”, donde necesitan ese mineral para la elaboración de sus productos, interesándoles este sistema en lugar de reciclar.
Por otro lado la totalidad del coltán extraído del mundo como ya he mencionado, en un 80%, es procedente de la República Democrática del Congo. Por lo tanto la única forma que hay para acabar con este grave problema es exigir a la RD Congo, la legalización de todas sus minas, el control inmediato de las mismas para evitar los esclavos y el trabajo de los niños en condiciones deshumanizadas, la inspección de las mismas por observadores independientes.
Es muy difícil cuando ambas partes, los que extraen el coltan y los receptores, les gusta el sistema de ahora sin importarles de donde proceden e ignorando la sangre derramada que hay detrás de estas actividades.
Hacer un boicot de todos los productos que contengan coltan hasta que se tomen medidas eficaces y necesarias para combatir esta infamia. No podemos permitir el desarrollo tecnológico a base de la explotación, la esclavitud, la muerte y la sangre de miles de personas. El mundo no se puede sostener con la esclavitud y la muerte, hay que buscar fórmulas para poder vivir y avanzar en nuestra sociedad con dignidad y la cabeza bien alta. Estamos cerrando los ojos a una realidad que no queremos ver. Pasa igual que con la destrucción de las selvas tropicales o el cambio climático. El hombre ha llegado a un estatus tal que no le importa lo que estamos haciendo sin pensar en el futuro. Destruimos en base a un capitalismo desmedido y sin control que arrasa los recursos de la naturaleza sin poner freno y sin un razonamiento lógico.
Debemos exigir el reciclaje del coltán y buscar soluciones que no impliquen el abuso, la esclavitud…que nuestros móviles y ordenadores no tengan sangre inocente derramada.
Es imposible. El consumidor no tiene información de ninguna clase a este respecto. Las multinacionales se guardan de donde proceden las materias primas de la elaboración de sus productos electrónicos. Es más, solo hasta hace poco, hemos conocido que el coltán es imprescindible para su fabricación. Nosotros desde el Proyecto Gran Simio lo llevamos denunciando hace cinco años sin que nadie haga nada.
Las medidas que ha puesto ahora la Unión Europea, son totalmente escasas en base principalmente a la cantidad de lobbies existentes en el Parlamento que controlan las decisiones de los europarlamentarios. Toda medida que afecte a las multinacionales y que no sean económicamente beneficiosas, son paradas o reducidas por estos lobbies que deberían prohibirse en un sistema que se supone democrático.
Es imposible rastrear la cadena de producción en un sistema como en el que estamos inmersos, donde la información es sesgada y donde el mundo de la política se mezcla con los intereses de las multinacionales y viceversa.
Ignoro este punto. Pero una cosa es decirlo y otra hacerlo. ¿Quién nos garantiza que eso es verdad?. Ellos tienen el poder y el blanqueo como he dicho al principio de esta entrevista, es fácil de hacerlo como se blanquea el dinero o la explotación de diamantes.
Las empresas saben que la sociedad cada vez es más sensible en estos temas e intentan lanzar mensajes para captar el consumo de sus productos. ¿Pero quién nos confirma la verdad? ¿Qué mecanismos tiene el consumidor para reclamar la información? Hoy por hoy ninguno efectivo.
http://simiomobile.com/
http://es.blastingnews.com/internacionales/2015/05/la-union-europea-un-paso-mas-cerca-de-controlar-los-minerales-en-conflicto-00416453.html
PEDRO POZAS TERRADOSDirector Ejecutivo Proyecto Gran Simio (GAP/PGS-España)