Envidia podrida

Publicado el 08 enero 2014 por Torrens

No lo puedo evitar. Siento una inmensa envidia de los ciudadanos británicos por vivir en un país donde, aunque no exentos de escándalos, los políticos mantienen un mínimo más que aceptable de honestidad y seriedad.

Aparte el tema del secesionismo escocés y catalán, al que me he referido muchas veces como una gran demostración de la inteligencia pública británica en contraste con la estupidez y deshonestidad públicas españolas, acaba de producirse otro hecho que supone una comparación insultante.

El Reino Unido, que normalmente ya soporta inviernos muy crudos, está padeciendo este año uno de los peores de la historia, con grandes galernas en secuencia, una tras otra, con vientos de hasta 170 Kms. por hora (dicen que a un pueblo que se llama Seven Oaks, después de una fuerte galerna le cambiaron el nombre a One Oak), grandes inundaciones y todo tipo de daños y destrozos, con zonas extensas que se han quedado sin energía eléctrica por varios días, a pesar que en la mayor parte del país cada usuario está servido por más de una red, y, por cierto, a precios de tarifa notablemente más bajos que en España.

El cúmulo de desgracias (7 personas han muerto por culpa de las tormentas), perjuicios, averías y destrozos han sido, y siguen siendo, de tal calibre que el Parlamento nombró una comisión para dictaminar si los recortes que su Primer Ministro David Cameron aplica desde que ganó las elecciones en 2010, han sido determinantes en los inmensos daños sufridos, y el informe final de dicha comisión concluye con total rotundidad que efectivamente, si no se hubiesen efectuado los grandes recortes padecidos por los equipos de defensa civil parte de los daños no se habrían producido y la respuesta de los equipos de reparación y rescate habría sido mucho más rápida y eficaz.

Hasta aquí todo parece más o menos normal, aunque muy probablemente una comisión del Parlamento español jamás sería tan clara y contundente. Pero es que la presidenta de la mencionada comisión del Parlamento británico es una MP de nombre Anne Mc.Intosh, escocesa, como su nombre indica, y miembro importante del partido conservador, que estuvo cerca de ser nombrada ministra. Es decir, la comisión estaba dirigida por una diputada tory, del mismo partido que el Primer Ministro y el gobierno. Por cierto, por si no lo sabíais, en las comisiones de investigación parlamentaria del Reino Unido, aunque dirigidas por uno o varios diputados, buena parte de sus miembros, casi siempre más de la mitad, son expertos en el asunto que se investiga, que no son necesariamente miembros del Parlamento y que tienen total libertad para expresar su opinión si no están conformes con las conclusiones de la comisión, es decir, se lo toman en serio.

¿Os imagináis a Alicia Sanchez Camacho presidiendo una comisión similar en España? aparte la montaña de estupideces que soltaría, seguro que la conclusión de la comisión sería que los recortes aplicados por el gobierno Rajoy no solo no tienen nada que ver con los daños sufridos, sino que han evitado que los daños fuesen mayores, y del desastre solo hay un responsable: el gobierno socialista anterior al de Rajoy. Aunque también es cierto que si el gobierno y el presidente de la comisión hubiesen sido del PSOE la conclusión del informa habría sido la misma pero a la inversa.

Para comparar, hoy mismo, miércoles 8, el Sr. Rajoy ha dicho que con su intento de conseguir apoyo internacional Mas hace el ridículo, y tiene razón, ¡A quien se le ocurre mandar una carta casi circular en ingles al Primer Ministro de Francia!, país además cuyas simpatías por cualquier consulta sobre la independencia de Catalunya son perfecta y fácilmente descriptibles por lo escasas. Pero es curioso que lo diga Rajoy que no para de meter la pata, que dice que quiere negociar pero después de que se le de la razón y cuyo jefe de exteriores ha mandado a las embajadas europeas un memorándum sobre el separatismo catalán que no pasa de panfleto. Al menos Mas hace el ridículo en cuatro idiomas.

Lo dicho, comparaciones sumamente insultantes y mucha envidia podrida por mi parte.