Epístola del viernes (2)

  "Soy lo suficientemente feo y lo suficientemente bajo como para triunfar por mí mismo"                                                                                                     Woody Allen




Querido Woody:
Después de pensar durante unos minutos, tenía claro que debías estar en mi lista de destinatarios de estas humildes espístolas. ¿Sabes? No siempre me gustaste, me parecía que te interpretabas a tí mismo y que verte era siempre igual: un señor maduro, neurótico y frustado sexual necesitado de terapia permanente. Para más "inri" supe que dejabas a tu mujer para empezar una nueva vida con vuestra hija adoptiva. Sí, ya lo sé, eso pertenece a tu vida privada y no debe inmiscuirse en tu trayectoria profesional pero, a veces, tanto en el séptimo como en otros artes y menesteres, me cuesta separar ambos aspectos.
 
 Un día, leyendo un pequeño libro sobre las cartas que ateos y creyentes mandarían a Dios respecto a la vida después de la muerte, ví que Borges comentaba que "la eternidad conlleva caer en infinitas repeticiones de todo, lo cual es un panorama probablemente atroz". A continuación leí "Woody Allen añade en el mismo sentido que habría que ver de nuevo Sonrisas y lágrimas, y no sólo los que estuvieran en el infierno” .
 Aunque no estoy de acuerdo con tu reflexión sobre esta película, debo decir que me reí bastante con la idea. Lo cierto es que es rara la ocasión en que no me río con alguna de tus famosas citas.
Lo siguiente fue hacer zapping y encontrarme con "Misterioso asesinato en Manhattan". Poco a poco me fuiste ganando sin que fuera consciente de ello. Empecé a ver tus trabajos, y casi todos me gustaban. Tienes un estilo propio único que hace que te odiemos o te admiremos. Yo hace tiempo que te admiro.
 
Sólo tú podías hacer que ante la palabra "Manhattan" a casi todos de nos venga a la mente la misma fotografía, y eso que no te gustó el resultado del film e intentaste rodarla de nuevo.
 
 Eres capaz de desviarte del camino habitual y sorprendernos con un thriller de calidad  que no parece estar dirigido por tí (Match point).
 
Ya he perdido la cuenta de las veces que he visto Scoop. Menuda la química en ese trío con Hugh Jackman y Scarlett Johansson Tus ocurrencias en el guión son sublimes. 
 En tu carrera hay de todo, y en este sentido debo decirte que nunca te perdonaré "Melinda y Melinda". Mr. P. tampoco me perdona a mí que lo llevara al cine a verla. Qué forma de fastidiarnos aquella noche. Sin embargo, jamás podré agradecerte lo suficiente ni encontraré palabras para definir lo que me hiciste sentir con "Midnight in Paris". Ver reflejado en una película un sueño que a todos nos gustaría vivir denota mucha maestría y genialidad por tu parte. Gracias por invitarnos a fantasear contigo y compartir dos horas en el  París de los años 20 con algunos miembros clave de la "generación perdida".
Pero tu sapiencia no se limita al cine, resulta que te encanta el jazz, tocas en directo, seleccionas cuidadosamente las bandas sonoras de tus películas y das conciertos. Solías venir una vez al año a San Sebastián a tocar, pero el precio de la entrada era prohibitivo. Me encantaría verte alguna vez, aunque de momento me conformaría con hacerme una fotografía junto a la estatua-homenaje que te hicieron en Oviedo. Todo llegará. Hasta entonces,
 
FELIZ VIERNES BUEN FIN DE SEMANA