Equipos históricos: El Manchester United de los “Busby Babes” (I)

Publicado el 29 febrero 2012 por Marianofusco

Hasta que el lamentable desastre aéreo de Munich se interpuso en su camino, el célebre Manchester United de los “Busby Babes”, conducido por Sir Matt Busby y forjado en base a futbolistas jóvenes e inexpertos pero sumamente talentosos y valientes, encandiló a Europa y el mundo con su fútbol y dado el carisma y la humildad que atesoraba se transformó en el equipo más querido de la década del ’50.

Matt Busby, el revolucionario:

Sin Matt Busby aquellos años en los que el Manchester United fue admirado y reconocido no hubieran sido posibles. Ni aquellos, ni probablemente los que vinieron posteriormente, en los que la entidad fue haciéndose cada vez más grande hasta transformarse en lo que es hoy en día.

Cuando Busby llegó al club en 1945, el United era un equipo como cualquier otro, que ya había sufrido dos veces el descenso a la Second División y que una vez concluida la Segunda Guerra Mundial se encontraba sin rumbo y prácticamente a la deriva.

Todo cambió con su llegada. Y no solo desde el plano deportivo, sino también desde el institucional, ya que ocupando el rol de entrenador y manager el escocés modificó por completo la triste realidad del club con ideas revolucionarias como la instauración de reuniones sociales o la de hacer participar a gran parte de sus futbolistas en las tareas administrativas.

En lo estrictamente deportivo, fundamental también fue la creencia que Busby tenía en el fútbol base, ya que dicha filosofía hizo que el United viera reforzado su plantel con juveniles de muy corta edad y no tuviera que gastar dinero en fichajes. No en vano el legendario técnico escocés siempre solía repetir: “Un jugador es lo bastante mayor siempre y cuando sea lo suficientemente bueno”.

Austera para algunos, dicha política rindió sus frutos y dos años después de la llegada de Busby el United fue asumiendo progresivamente un protagonismo al que había dejado de estar acostumbrado sumando tres subcampeonatos ligueros (1947, 1948 y 1949, ya jugando de local en el reconstruido Old Trafford, dos veces destrozado durante la guerra) y un titulo de FA Cup, obtenido en 1948 frente al Blackpool (4-2), 37 años después del ultimo trofeo alzado por el club.

Dicho logro hizo que el proyecto se afiance y ya en 1952 el Manchester conquistó por tercera vez en su historia la First División (hoy Premier League) luego de vencer 6-1 al Arsenal y culminar por encima del propio cuadro “Gunner” y del Tottenham. El titulo de liga llegaba tras 41 años y la sensación de que algo grande se estaba gestando era enorme.

El arribo del gran Duncan Edwars y la consolidación definitiva:

En base a esfuerzo y trabajo y creyendo en un plantel que tenia un promedio de edad de 22 años el Manchester United había logrado transformarse hacia mediados de la década del ’50 en un equipo admirado, respetado y querido.

Denominados “Busby Babes” por el periodista Tom Jackson, del Manchester Evening News, algunos de los futbolistas que lo componían eran Bill Foulkes, Billy Whelan, Tommy Taylor, Eddie Colman, David Pegg, Geoff Bentt, Liam Whelan, Dennis Viollet, Roger Byrne, Johnny Berry y Bobby Charlton, quien era aun más joven que el resto. Todos eran brillantes, aunque ninguno podía compararse al gran Duncan Edwars.

“Nunca he conocido a alguien tan dotado técnicamente, tan fuerte y con la presencia que él tenía. Era bueno con la derecha, bueno con la izquierda, con un extraordinario remate de cabeza y muy sólido en defensa. Es la única persona a quien, incluso hoy, realmente me sentía inferior”. El propio Charlton lo reconoció una y otra vez transcurridos los años. Edwars era un fuera de serie y su condición de estrella absoluta del equipo no se la podía discutir nadie.

Nacido en 1936 en la ciudad de Dudley, Edwars fichó por el United en 1952 y a partir de entonces y más aun luego de debutar en el primer equipo con apenas 16 años el 4 de abril del año siguiente ante el Cardiff City trazó una progresión meteórica. Además de un talento inigualable tenia un físico increíble y dentro de la cancha era capaz de todo. No había otro como el. Era el mejor y estaba llamado a convertirse en una verdadera leyenda.

Sobrado de talento, aquel United enamoró a absolutamente todos con su fútbol y ejerciendo su condición de mejor equipo del momento conquistó otras dos Ligas de forma consecutiva, en 1956 y 1957, año en el que también llegó a la final de la FA Cup (cayó ante el Aston Villa) y accedió a las semifinales de la Copa de Europa (fue eliminado por el Real Madrid), certamen del que formó parte gracias a la insistencia de Busby, quien convenció a las autoridades del fútbol ingles, que consideraban sus certámenes como los mejores y no creían necesario competir en Europa, de lo beneficioso que seria para los clubes británicos participar en dicho torneo.

La tragedia que lo alteró absolutamente todo:

Llegado el año 1958 nadie tenia dudas. Joven, intrépido y amado, aquel era un equipo extraordinario y contaba con el potencial futbolístico suficiente como para discutirle el poderío del fútbol europeo y mundial al Real Madrid de Alfredo Di Stéfano.

Demostrado quedó en dicha temporada, hasta que lamentablemente el fatal y recordado accidente aéreo del 6 de febrero de ese mismo año lo alteró absolutamente todo. El plantel regresaba desde Belgrado tras eliminar al Estrella Roja y asegurar su lugar en las semifinales de la Copa de Europa en el vuelo 609 de la aerolínea British European Airways y había hecho escala en Munich para cargar combustible. Era de tarde y dada la gran cantidad de nieve que caía las condiciones climáticas para seguir viaje no eran las mejores.

Había mucho viento y la pista estaba helada. Despegar no era recomendable, sin embargo el capitán James Thain lo intentó. Lo hizo dos veces y debido a diversos problemas que sufrían los motores fracasó. Y a su tercer intento, cuando eran exactamente las 15:04, el avión no logró levantar suficiente vuelo debido a la formación de aguanieve al final de la pista (la cual causaba deceleración del aparato) y tras deslizarse unos metros se estrelló contra una casa lindante al aeropuerto.

El bimotor, un Airspeed Ambassador, se incendió por completo y para muchos de los 44 pasajeros que allí viajaban no hubo escapatoria. En el acto murieron 22 personas, 7 de las cuales eran futbolistas del equipo (el delantero centro Tommy Taylor, de 26 años, el lateral y capitán Robert Byrne, de 28, el defensor Geoff Bent, de 26, el centrocampista Mark Jones, de 24, el extremo izquierdo David Pegg, de 22, el gran interior Liam Whelan, de 22 y el también centrocampista Eddie Coleman, de 21).

Duncan Edwars resistió la coalición y fue trasladado de urgencia y en estado crítico al hospital más cercano. Luchó quince días por su vida pero debido a las múltiples lesiones que había sufrido terminó falleciendo el 21 de febrero. Tenía tan solo 21 años y todo por vivir y conquistar.

“Con el paso de los años, cuando escuchaba a Muhammad Alí decir que era el más grande, no podía parar de sonreír. El más grande fue Duncan Edwards”, dijo un tiempo después James Murphy, asistente técnico y mano derecha de Busby, quien sobrevivió al accidente y estuvo junto a Edwars aquellas ultimas horas. “¿Eres tú, Jimmy? ¿El partido ante los Wolves es a las tres?”, contó que le decía. Duncan estaba postrado y aun así pensaba en reponerse y jugar. Lamentablemente nunca más pudo hacerlo.

Quienes al igual que Murphy también estuvieron entre los 21 pasajeros que se salvaron fueron el arquero Harry Gregg, el extremo derecho Johnny Berry y el centrocampista Jackie Blanchflower (quienes sin embargo no pudieron volver a jugar), el goleador Dennis Viollet, los arqueros Harry Gregg y Ray Wood, el gran Bobby Charlton, el celebre central Bill Foulkes, el extremo derecho Ken Morgans y el extremo izquierdo Albert Scanlon. Además del entrenador Matt Busby, quien al igual que Charlton y Viollet fue rescatado de entre las llamas y arrastrado hasta la nieve por el propio Gregg.

Especialmente llamativo fue lo de Busby, quien contra todo pronóstico y tras recibir dos veces la extremaunción se recuperó milagrosamente del accidente y desde la misma habitación del hospital en el que se encontraba reponiéndose mandó un mensaje de tranquilidad y esperanza al país, el cual lloraba las muertes, mediante una conferencia radial: “Damas y caballeros, les hablo desde una cama en el hospital de Munich. Después del accidente sufrido hace aproximadamente un mes, les gustará saber que los jugadores que quedan y yo mismo nos estamos recuperando poco a poco”.

Echa efectiva la recuperación, Busby regresó al banco de suplentes y secundado por Murphy, quien estando solo había iniciado el proceso de reconstrucción, condujo al equipo a la final de la FA Cup solo tres meses desde de aquella fatídica tarde. Reforzado por juveniles de las inferiores el United cayó 2-0 ante Bolton pero el resultado poco importó. Pudo más la emoción y ni siquiera hubo festejo por parte del rival.

Gran parte de los integrantes de aquel legendario conjunto habían perdido la vida y el dolor aun permanecía muy latente. Solo con los años lograría mermar aunque sea un poco. Continuara…