Mentiders / Éramos mentirosos
Autor: E. LockhartEditorial: Fanbooks
Fecha de publicación: 7 de octubre de 2015
Páginas: 252
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Una ilustre familia de Nueva Inglaterra.
Una isla privada.
Un grupo de cuatro amigos —los Mentirosos— cuya amistad se vuelve destructiva.
Una rebelión. Un accidente. Un secreto.
Mentiras y más mentiras.
Amor verdadero.
La verdad, por fin.
Aunque han pasado varias semanas desde que leí Mentiders (Éramos mentirosos en castellano, We were liars en inglés), todavía me cuesta encontrar las palabras adecuadas para hablaros de él. No me sorprende ver las reacciones de amigos y compañeros lectores respecto a este libro. Parece que el efecto que provoca s muy opuesto, algunos lo aman y otros lo odian.
La autora, E. Lockhart, pidió a los lectores que no contaran nada de lo que sucede en el libro, para mantener así el misterio. Una buena estrategia de marketing, hay que reconocerlo. Todo ese secretismo alrededor del libro hizo despertar mi curiosidad y diría que fué esto lo que me pareció más llamativo del libro. A mi y a miles de lectores más, por lo que parece.
Ser joven, rica, rubia, bonita, veranear en una isla privada… suena terrible, ¿verdad? Que las apariencias no te engañen, a los ricos también pueden hacerles daño, y Candence nos explica su historia. La familia Sinclair posee una isla privada. Tres primos adolescentes, Mirren, Johnny y Candence, junto con su amigo Gat se reencuentran allí cada verano. Los cuatro son inseparables y los mayores los conocen como “los mentirosos”. Pero algo va mal durante el verano de los 15 años, Candence sufre algún tipo de accidente y pierde la memoria. Un par de años después volverán a reunirse todos en la isla y Candence tratará de recordar lo que sucedió, a pesar de las evasivas que le dan todos para no contestar a sus preguntas.
Beechwood Island, la isla privada de la familia Sinclair.
No voy a profundizar más en la trama de Mentiders (Éramos mentirosos) porque es una historia que disfrutarás más si vas conociendo a la familia Sinclair por ti mismo. Lo que sí te diré es que me gustó mucho toda esta atmósfera de misterio y el hecho de que lograra mantenerme enganchada hasta el final tratando de descubrir qué es lo que está pasando.
Al adentrarte en la historia te encuentras con un estilo de escritura bastante peculiar, con frases e ideas fragmentadas. El estilo me ha parecido muy adecuado con la naturaleza de la historia, y con esta narradora que es poco fiable y que sufre alguna especie de trauma… Me encontré constantemente cuestionando qué era verdad y qué era mentira.
Bien es cierto que la historia podría haberse desarrollado más. Y por otro lado, hubiese mejorado muchísimo si la autora hubiese conseguido hacerme sentir tanto apego por los mentirosos como lo siente la propia Candence. Me faltó sentir esos lazos familiares que los unen a todos. De todas maneras, estas cuestiones no han afectado mucho a la manera cómo he disfrutado del libro. Aunque desde mi punto de vista no se trata del mejor libro del mundo, ni el mejor escrito, sí que he disfrutado mucho con él.
En esta ocasión, con lo que más he disfrutado ha sido con todo el misterio que rodeaba la historia. La autora logró despertar la curiosidad en mí por descubrir la verdad, y eso hizo que me leyera el libro de dos sentadas. En mi caso, el final logró sorprenderme. A pesar de que intuía por dónde irían los tiros, desde luego no me lo imaginaba así.
Recomiendo Mentiders (Éramos mentirosos) a todos los que tengan ganas de leer una historia young adult tentadora y a la vez escandalosa. Mentiders es un libro muy corto, apenas cuenta con 280 páginas que puedes leer en unas pocas horas. Una lectura ligera pero a la vez muy estimulante. Muchos opinan que el final era predecible, a otros los sorprendió. ¿A qué grupo perteneces tú?