Título: Érase una vez la URSS
Autor/a: Dominique Lapierre
Editorial: Planeta
Idioma: Español
Número de páginas: 200
Saga: —
En julio de 1956, al volante de un Simca Marly amarillo y negro, Dominique Lapierre (entonces joven periodista del Paris Match), Jean-Pierre Pedrazzini (fotógrafo) y sus dos mujeres dejan París y se dirigen a la Unión Soviética, un país prohibido a los occidentales, para realizar un reportaje. Circulan por carreteras desiertas, recorren trece mil kilómetros utilizando gasolina de aviones o tractores, el único combustible disponible después de dejar en la capital la única gasolinera en todo el territorio soviético. La libertad de movimientos de la que gozan es notable; pueden entrevistar a cualquiera y son recibidos con curiosidad y entusiasmo por un pueblo que cree de verdad en el comunismo y que piensa que éste durará mil años. Regresan a París en octubre, trayendo consigo el recuerdo de la oportunidad única que les ha ofrecido la historia.
Otra vez os traigo un libro basado en hechos reales. Dominique Lapierre y su compañero Jean-Pierre Pedrazzini eran dos jóvenes periodistas del Paris Match que lograron los permisos necesarios para aventurarse en un país hermético después de la caída de Stalin, la URSS. Así, junto a sus respectivas parejas realizaran un viaje de trece mil kilómetros para conocer y entrevistar a personas con diferente estatus social, desde un campesino hasta un cirujano.
Como os dije un poco más arriba, no me arrepiento de haberle dado una oportunidad al libro pero tampoco me alegro. Después de haber leído un libro como Diario de Ana Frank, me esperaba poder conocer muchas más cosas sobre un país como la URSS, pero a pesar de que he conocido la forma en la que vivían cinco personas completamente diferentes en este país no ha sido lo que yo me esperaba.
El libro es más bien una biografía de Dominique Lapierre y su viaje a la URSS. Nos cuenta prácticamente todo el viaje que hicieron él, su amigo y sus esposas. La forma en la que les recibía la gente, lo amables que eran con ellos, como les vigilaban todo el rato las autoridades... Y la verdad, yo me esperaba algo mucho más dinámico y no tan plano. Ya que al fin y al cabo, la forma de vivir de esas personas a las que entrevistan es solamente un conjunto de datos que logran recopilar y te pone el autor ahí en el libro. Sé que no me explico bien, pero para que os hagáis una idea es como leer un libro de historia en el que te cuentan cuando cobraban, cuanto medía su casa, cuánto tiempo duraba su jornada de trabajo...
Así que a pesar de todo y aunque el libro está bastante bien para conocer un poco más sobre un país como la URSS, yo no os lo recomiendo a no ser que os llame la atención este tema.