Eratiní 13 de julio de 2012 Ερατεινή
La mañana griega es azul.El mar se come todo(incluso mi desayuno con bugacha)
Apenas salimos del frescor de la casa de Stamatis, julio aprieta con sus dedos cálidosnuestra piel recién despertada.
Al otro lado de la calle,un pescador ofrece pescado,fresco, como su mirada griega, forjada con sal marina y oleadas.
Sonidos de verano que rodean nuestros pasos, mientras contemplamos los oscuros erizos negrosbajo las aguas transparentes de nuestras risas.
Los hombres que hablan de filosofía, juegan con los combolois entre sus dedos.Su charla aturde mis sentidos yme traslada a tiempos remotos.
Sonrío y apuro el caféEl mar, testigo azul, me observa quieto.