por Bernardo Villar
No importa qué, eres una persona exitosa.
Mira tus resultados, a tu alrededor tienes la muestra: tienes justo lo que quieres.
No nos engañemos: todos los seres humanos tenemos éxito en crear lo que estamos comprometidos a crear. Puede ser una vida que funcione o una vida que no funcione, puede ser prosperidad o pobreza total, puede ser la carrera ideal o el empleo que odias. Siempre tienes éxito. No eres tonto, sabes lo que haces. ¿Qué pretendes no saber?
Si tus relaciones personales funcionan, tienes éxito en ellas. Si no funcionan tus relaciones, estás teniendo éxito en relacionarte disfuncionalmente. Si tienes el dinero que requieres y de sobra, estás teniendo éxito financiero; si no tienes un centavo, estás teniendo éxito en ser escaso. Si estás viviendo una vida que vale la pena vivir, tienes éxito en ello, igual que tienes éxito en crear una vida de supervivencia si eso es lo que tienes.
Que nadie te diga lo contrario. Eres un triunfador.
Tienes lo que estás comprometido a crear.
¿Dónde está tu compromiso? Checa tus resultados. Tus resultados te dirán sin falla lo que has estado comprometido a crear con tanto éxito.
¿Cómo puedo decirte que vivir quebrado es tener éxito? ¿Cómo se me ocurre decirte que tener relaciones que no funcionan es ser exitoso? ¿Cómo me atrevo?
Pues si, me atrevo. Tener éxito en algo es conseguir todo aquello que estoy comprometido a conseguir. Así que observa a tu alrededor: tienes éxito en todo eso que te rodea.
¿Dices que no te funciona?¿Que mereces otra cosa? ¡Fantástico! suena como lo que todos esperamos oír. Suena bonito, correcto... hasta inspirador. ¿Ahora qué?
Lo único que impacta la realidad es la acción. La acción construye nuestra realidad una vez que el lenguaje la crea. De nada sirve que yo diga que quiero otra cosa si solo hago lo mismo una y otra vez.
De nada sirve quejarme de que solo cosecho manzanas y no peras si nunca he sembrado peras, solo manzanas.
Así que, si puedes ver que no importa qué, tienes éxito en la vida (no hay tal cosa como fracaso) entonces exitoso. Si no te gusta en lo que tienes éxito, checa por qué has estado comprometido a crearlo, porque has estado recibiendo recompensas por ser quien eres y hacer lo que haces; de algo te ha servido. Y si ahora quieres ser exitoso de otra manera, (finanzas sanas, relaciones efectivas, etc) comienza a tomar acciones congruentes con lo que dices querer y sobre todo, con quien dices ser.
¿Quieres saber tu contrato? Mira a tu alrededor tus resultados. No importa lo que digas que eres. Importa, lo que en hechos estás siendo.