¿Eres la mujer que Dios quiere?

Publicado el 20 mayo 2015 por Max Damián @soymaxdamian
Si hablamos que la mujer que Dios quiere debe ser sumisa, rápidamente lo relacionan con algo negativo ─esclava o maltratada─, y es que hoy en día el feminismo a llegado a alturas de querer poseer la autoridad del hombre. Siendo el caso así, Martha Peace, en su libro ''La Esposa Excelente (The Excellent Wife)'' explica como debe ser una esposa sumisa: ''Una esposa debe ser sumisa a su marido en todo a no ser que él le pide pecar''.

Es muy importante que la esposa sepa cual es su lugar dentro del matrimonio, y que Dios a creado esta institución para que Él sea Glorificado. ¡Si! Aunque no lo creas tu labor como esposa tal como Dios lo manda es una forma de darle Gloria a nuestro Dios. Puede que tal vez refunfuñes con lo que digo, pero eso lo dice la Biblia.

«Asimismo vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas.» [1 Pedro 3:1]
Cuando una mujer subleva la autoridad de su marido, es ahí donde empiezan los problemas y como consecuencia surge un hogar disfuncional. Tampoco estoy diciendo que debas dejar pisotearte y esclavizar, pero como esposa tu deber es obedecer a tu marido en todo, claro está que como dice Martha, mientras ello no te lleve a pecar.Entiendo que ustedes las mujeres son personas sumamente sentimentales, y que nosotros lo varones no tanto. Por ello muchas veces ustedes (mujeres) dejan que sus sentimientos las conduzcan en todo y se olvidan del verdadero significado que tiene el amor. Tampoco quiero anular el hecho que nosotros (varones) debemos ser detallistas y románticos, pero cuando no es así, es tu deber como mujer honrar a tu esposo aun sobre tus sentimientos, ¿no lo crees?, pues 1 Corintios 13:4-8 define puntualmente el significado de AMOR.

En pocas palabras tu lugar como esposa es apoyar a tu esposo en todo, dar tu opinión y con tu sabiduría colaborar en cada decisión que como matrimonio deben tomar. Ser sumisa por ende significa que te debes a tu esposo, él es tu cabeza, así como Cristo es el esposo y cabeza de la iglesia (esposa). Más por todo esto tienes una gran recompensa por parte de Dios.