Porque todos sabemos que el ser un inútil en el colegio no está reñido con triunfar. Ni que seas el que mejor notas saques te va a arreglar la vida.
Si a ti también te dijeron de pequeño que no valías para nada, si has repetido cursos, asignaturas y te has desesperado con los estudios, tranquilo, nada es lo que parece. -Esto tampoco es un anuncio publicitario-.
Vamos, que le puedes decir a tu madre -o a tu padre, o a quien sea- eso de: Tranquilo... voy a ser un genio en el futuro. Y doy fe, porque yo no he sido nunca repetidora y conozco repetidores a los que les va mejor que a mí, claro que tampoco es complicado porque con tener trabajo cualquiera está mejor que yo...
Puede que a partir de ahora la clase de los repetidores, o el grupito al que llevaban a clases extras para que mejoraran en notas sean los que vayan por el pasillo con la cabeza alta y mirando por encima del hombro, mientras sus compañeros se apartan a su paso cual película de adolescentes hormonados en Estados Unidos.
Y si os piden nombres de ejemplos, os los inventais, porque ninguno son conocidos y total... siempre se puede recurrir a aquello de que Einsten suspendía. Y mírale dónde llegó. El tio se lo tenía bien callado que en realidad era más listo que todos.
Otra excusa es decir que es una estrategia de mercado laboral, para engañarlos a todos y luego sorprenderles con un as en la manga unido a un triple salto mortal con doble voltereta hacia atrás. Así les dejaréis con la boca abierta, aplaudiendo y diciendo pues el niño no era tan tonto.
Aunque personalmente, os recomiendo que no repitais, porque si ya es un rollo estudiar algunas asignaturas un año, imaginaos dos. Por no hablar de que te toca cambiar de clase. Aunque pueda ser una ventaja para alguno, de pringao al repetidor. Ooooooh....