Pero las casualidades quisieron que ese año, la imprenta encargada de confeccionar ambos carteles (Imprenta Pinelo), o desconociera el primer apellido de Fermín o, a propósito, lo cambiara, sustituyendo la V por la B, como podemos apreciar en las imágenes que ilustran este post. Por desgracia esta es una tónica general y es bastante normal rebautizar a matadores y sobre todo novilleros, o hacerlos hijos adoptivos de localidades en los que en su vida han puesto un pie. Aún así, el testimonio de la presencia como matador en la Subbética del nuevo empresario de Cabra, aunque sea con "B", queda demostrada en estos dos carteles.
Pero las casualidades quisieron que ese año, la imprenta encargada de confeccionar ambos carteles (Imprenta Pinelo), o desconociera el primer apellido de Fermín o, a propósito, lo cambiara, sustituyendo la V por la B, como podemos apreciar en las imágenes que ilustran este post. Por desgracia esta es una tónica general y es bastante normal rebautizar a matadores y sobre todo novilleros, o hacerlos hijos adoptivos de localidades en los que en su vida han puesto un pie. Aún así, el testimonio de la presencia como matador en la Subbética del nuevo empresario de Cabra, aunque sea con "B", queda demostrada en estos dos carteles.