Perspectiva de una estudiante de comunicación.
Como todos sabemos el agua es un elemento importante para la vida del ser humano, y que además la carencia de este vital líquido ocasiona enfermedades, guerras, pobreza y muerte. Las necesidades de agua en una persona se relacionan estrechamente con factores como el clima, los hábitos alimenticios, actividad física, entre otras. Según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una persona necesita al menos 50 litros de agua al día para cubrir los requerimientos básicos como: comer, beber, higiene y saneamiento.
Pero la falta de este líquido es una de las crisis sociales y naturales a la que el ser humano se enfrenta cada día, ya que es parte de la supervivencia propia del humano y del planeta. Actualmente, las cifras hablan por sí solas, ya que 400 millones de personas viven en regiones con grave escasez de agua y esta es una preocupación en todo el mundo, según la BBC.
Es importante resaltar, que diariamente mueren 41 mil niños por falta de agua potable, mientras que en los países desarrollados el uso del agua es diez veces mayor que en los de tercer mundo. Conforme crece la población la forma de consumo del agua también, y lo peor de esta situación es mucha gente no tiene conciencia de la manera en que consumen y tiran agua, mientras que otros mueren por no contar con el servicio de agua potable.
Un ejemplo de que la privación de agua y la pobreza están vinculadas. La falta de agua significa grandes caminatas a posos, ríos o donde se encuentra la pipa de agua para obtener un solo balde con agua. Pero se necesitarán unos $100 millones de dólares adicionales al año para aliviar el problema de escasez, según estima la Comisión Mundial.
África, el país que más sufre.
Los problemas relacionados con el agua son hoy en día reconocidos como el peligro más inevitable y grave en contra de la humanidad. El continente africano no es la excepción. Tan sólo en este continente, en las dos décadas siguientes, catorce países tendrán dificultades para proveer el líquido a su población y otros trece se encaminan hacia la misma situación, según señalan los datos de la ONU.
En abril del pasado 2006, durante el IV Foro Mundial del Agua realizado en la Ciudad de México, la ministra africana Anna Tibaijuka, alertó acerca de la falta de agua potable y los problemas de alcantarillado en el continente africano. Además señaló que muchas mujeres en África no contraen matrimonio si el futuro marido no las provee de agua y al menos un baño en la residencia donde habitará. "Esto es lo que se ha llegado, es el grado necesidad", afirmó Tibaijuka.
En el pasado Foro Mundial del Agua se dijo que en varias regiones del África muchas mujeres deben recorrer kilómetros para conseguir una cubeta de agua para beber, y para cocinar deben regresar por una cubeta más de agua.
La gente del África se encuentra en peligro, pero es en particular por los problemas de agua. "Los gobiernos africanos tenemos la responsabilidad de hacer algo al respecto porque en la mayor parte de nuestros estados no contamos con plan de acción que integre al respecto al adulto y los niños dentro del marco de la cultura del agua", recalcó al final Anna Tibaijuka.
Más problemas...
Otro de los problemas que da la insuficiencia de agua son las enfermedades como hepatitis, diarrea, cólera, malaria, tifoidea, entre otras. Los brotes epidémicos provocados por la existencia de microbios en el agua potable pueden llegar afectar cientos de miles de personas en todo el mundo, según la Organización Mundial de la Salud. Un ejemplo es el país asiático Yemen. Según un reporte por parte del Parlamento sobre Agua y Medio Ambiente de dicho país en el 2005 tres de cada cuatro de los 20 millones de habitantes se encuentran gravemente afectados por enfermedades de origen hídrico, y esto es debido a que el agua está contaminada y que esto se debe a los ineficientes sistemas de saneamiento. Sólo un 7% de la población de Yemen goza del servicio de agua potable.
En el agua es tan importante la cantidad como la calidad, pero el aumento de la contaminación reduce cada vez más las reservas utilizables. Millones de personas mueren cada año por enfermedades que están vinculadas a la mala calidad del agua.
Debemos recapacitar en la manera que utilizamos el agua, en no contaminar el agua y el ambiente en general, porque esto es cuestión de elegir, ¿queremos vida o muerte?