Éstas son algunas de las muchísimas preguntas que se hacen emprendedores e inversores, los dos agentes del emprendimiento en nuestro país. Dos agentes que, sin embargo, en ocasiones no están lo suficientemente entrelazados y no encuentran ese punto de conexión que ha de unirles para desarrollar un proyecto juntos. Y es que la comunicación entre ambos es vital para que las iniciativas prosperen.
En este sentido, hemos charlado con Raúl Mata, de FDI Internet&Mobile, que compagina ambos perfiles y observa las distintas -y a veces enfrentadas- realidades de los dos lados de la balanza, aquellos que están condenados a entenderse. Raúl constata que a menudo la comunicación entre emprendedores e inversores es complicada: “Yo fui una vez a un evento de emprendedores, me presenté y dije que era inversor y que estaba buscando proyectos en los que entrar. Al final de la charla sólo se me acercaron dos personas. ¿Dónde estaban los demás? Lo lógico habría sido que hiciesen cola, aunque sólo fuese para informarse”.
Y es que a veces emprendedores e inversores están tan alejados que ni siquiera confían en que el trabajo conjunto sea fructífero: “Es relativamente fácil encontrar perfiles de emprendedores; lo complicado es que sean buenos empresarios”. Al hilo de esto, Raúl critica la abundante oferta de ciertos eventos para emprendedores: “Creo que hemos llegado a una saturación de estos eventos. Muchas veces vas a escuchar a un señor y te acabas dando cuenta que el que habla casi tiene más cacao mental que tú”.
Es por eso que Raúl considera clave que este tipo de eventos vayan más allá de las charlas recopilatorias de éxitos, y está convencido de cuál es la palabra clave a la hora de intentar eliminar las barreras entre emprendedores e inversores: formación. “Cualquiera es capaz de dar una clase magistral, pero no de formar. Es importante que en estos eventos se forme a la gente. No es malo que un emprendedor sea un mal empresario; ahí es donde entra la formación y el trabajo conjunto”.
Y si los emprendedores tienen que ser formados, tres cuartos de lo mismo pasa con muchos empresarios y posibles inversores: “A los que llevan tiempo en internet no hay que enseñarles prácticamente nada, pero ahora hay un tipo de inversor nuevo, que es el ejecutivo que invirtió en otro tipo de compañías y se está metiendo en empresas de tecnología. Hay empresarios que antes invertían en comprar pisos y ahora están invirtiendo en internet”.
¿Cuál es el problema de estos empresarios? Que no sueltan el dinero tan fácilmente: “Hay mucho dinero de inversores privados dando vueltas, pero muchos inversores desconocen internet y son más cautos. Esos empresarios necesitan ser formados, porque los modelos de negocio son diferentes a los modelos a los que ellos están acostumbrados”.
Pero entonces, ¿qué hacemos para que los inversores se acerquen a los proyectos? Raúl cree necesario que este tipo de empresarios reciban ayuda y asesoría a la hora de entrar en internet y, sobre todo, a la hora de esquivar los tradicionales escepticismos con la Red: “Gente escéptica siempre va a haber, pero cuando a la gente le das ratos reales cambian de actitud y se dan cuenta de que no hay burbuja. Sí puede haber una pequeña burbuja de sobrevaloraciones en Estados Unidos, pero eso no ha llegado a España ni por asomo, todos tenemos los pies en el suelo”.
Un primer paso para el trabajo conjunto
Raúl está convencido de que una forma de que emprendedores e inversores pierdan el miedo común y se vayan acercando es ponerlos a trabajar juntos: “Nosotros hacemos talleres en los que no hay clases magistrales, sino que alguien expone un problema concreto de su proyecto y entre todos le ayudamos a solucionar ese problema concreto-
Autor Raul Mata