Wine Spa de Valbusenda
El Wine Spa de este hotel de 5 estrellas es uno de los santuarios wellness más exclusivos donde disfrutar de toda clase de tratamientos perfectos para dar la bienvenida al nuevo año.
Cada año, enero nos ofrece la oportunidad de convertirnos en mejores personas, de renovarnos, de empezar de cero... Fijamos objetivos y metas con la esperanza de encontrar la fuerza de voluntad necesaria para cumplir todos y cada uno de ellos. Precisamente, esta lista de deseos está cada vez más orientada al cuidado personal y de la salud. En ese sentido, el Wine Spa de Valbusenda Hotel Bodega & Spa se sitúa como uno de los santuarios de bienestar más exclusivo, donde llevar a cabo buena parte de nuestros propósitos con tratamientos y rituales de belleza capaces de renovarnos por dentro y por fuera.
Tratamientos personalizados:
La experiencia empieza por el entorno, un extenso campo repleto de viñedos junto a la ribera del río Duero. De entrada, este es uno de los mejores escenarios posibles para adentrarse en un mundo en el que solo existe la posibilidad de dejarse llevar y disfrutar. Si sentirse mejor con uno mismo está en la wish list de este 2020, este Wine Spa es tu lugar de peregrinación con propuestas tan sugerentes como los tratamientos faciales personalizados, el circuito de hidroterapia con piscina de nado, piscina relajante con presión de agua, piscina revitalizante con presión de aire, piletas de contraste, sanarium, baño de vapor, sauna, ducha de sensaciones...
En cabina, además de los faciales existen también rituales de cuidado corporal y envolturas orientados a mimar cada centímetro de la piel y una selección de tratamientos exóticos como el masaje balinés, el abyhanga o el hot stone. En esta línea, existe una carta de masajes deportivos, relajantes y otros confeccionados específicamente para proporcionar una sensación de bienestar y placer de los pies a la cabeza.
Como no podía ser de otra manera, el Wine Spa de Valbusenda Hotel Bodega & Spa ofrece rituales de vinoterapia en los que se produce una mágica fusión entre el vino de sus propias cepas y la naturaleza y que se materializan en protocolos de belleza como el Piedra Turca, el Wine Massage, el Viña caolín corporal con vino blanco o rosé, elaborado con uva Tinta de Toro o el Néctar de la vid facial.
Tratamientos personalizados:
Con un equipo formado únicamente por profesionales y con los productos de belleza y cuidado más exclusivos, en Wine Spa hay un tratamiento para cada tipo de piel, un masaje para cada estilo de vida o actividad… pero un único propósito: hacer que el visitante se sienta bien en un ambiente de relax y desconexión y encontrando, por fin, la mejor versión de uno mismo. Esa que siempre nos prometemos alimentar y mostrar cada principio de año.