¿Es importante la ortografía para un profesional?

Por Adrylin

La ortografía en mi caso fue un tema con el que me “traumaron” desde que era muy pequeñita, en la escuela me enviaban a repetir 100 veces (a mano por supuesto) la palabra que había escrito mal, en el colegio me bajaban puntos por cada falta de ortografía no importaba la materia en la que hubiera cometido el error; mis profesores hicieron mucho hincapié en que tuviera una muy buena ortografía. En la vida universitaria no recuerdo a ningún profesor que haya mencionado el tema de la ortografía, pero ya en el plano profesional empecé a darme cuenta lo importante que es manejar una buena ortografía.

Normalmente procuro que mi escritura no tenga faltas ortográficas, aún me falta mejorar la redacción, pero la ortografiía es un tema que considero manejo adecuadamente. Durante mi experiencia profesional he generado gran cantidad de documentos, ya sean informes, memorandos, oficios, propuestas técnicas, correos electrónicos a mis colegas, jefes, clientes, proveedores y demás. Desde siempre la comunicación escrita ha sido fundamental.

Recientemente se realizó un cambio en mi lugar de trabajo y las nuevas autoridades son un poco más drásticas con el tema de la ortografía, existen pequeñas sanciones por cada falta de ortografía que se encuentre en un documento. Como todo cambio, al principio resultó un poco molesto, pero considero que esta medida ha colaborado mucho con el crecimiento profesional del equipo, pues actualmente todos se fijan muy bien en lo que han escrito o en lo que van a firmar para que no exista ninguna falta de ortografía; si esto se convierte en hábito para cada persona seguro todos habremos ganado.

Muchas veces el primer contacto o el más frecuente en las relaciones profesionales es a través de un medio escrito, por lo que en muchas ocasiones se dejan muy malas impresiones “únicamente” por escribir con faltas ortográficas. Aunque actualmente las herramientas informáticas nos ayudan mucho a evitar faltas de ortografía en documentos, es importante que conozcamos las reglas para no dejar una mala impresión.

Si desarrollamos el hábito de la buena lectura, seguramente también vamos a mejorar mucho nuestra ortografía y como consecuencia se mejorará nuestra imagen profesional.