Decíamos el jueves, en Pensamientos a Vuela Pluma,
que Santiago Abascal podría optar a la presidencia del Partido Popular en el
País Vasco. Pero, como muchos nos temíamos, no han tardado mucho en adelantarse
a posibles movimientos.El viernes, en un despacho, se decidía que la
sustituta de Antonio Basagoiti sería Arantza Quiroga, algo que será ratificado
el próximo martes en la Junta Directiva Regional del Partido Popular Vasco,
máximo órgano del Partido entre congresos. Según la actual dirección regional
se dice que Quiroga es una persona de consenso.Pero, ¿han consultado con los militantes? ¿saben la
opinión de los afiliados del PP vasco? me da a mí que no, que se han limitado a
sugerir el nombre de Quiroga a los “barones” del PP en vascongadas y a imponer
lo que venía dictado desde Génova. Vamos, que lo que hacen es devolver favores,
favores de lealtad al líder.Esa es la realidad de la democracia interna del PP,
eso es lo que tenemos en el principal partido político de España. ¿Y por qué no
cambia?, ¿por qué no se elige la nueva presidencia del PP vasco en votación
directa por los militantes? Creo que ha llegado la hora de cambiar el rumbo, de
empezar a mirar a los afiliados y simpatizantes, de empezar a escucharlos.Y empezar por el País Vasco sería todo un ejemplo.
Porque los afiliados y simpatizantes del PP en vascongadas se lo merecen, son
personas valientes, que han dado un importante paso de compromiso, de defensa
de España y su democracia, y se les debe tener muy en cuenta, se les debe
reconocer su actitud y decidir conforme a su opinión. ¿Se atreverá la casta
dirigente?Y que no me digan que en septiembre, octubre (o
cuando toque) convocarán un congreso regional y que a ese congreso podrá
presentarse todo aquel que quiera (y obtenga los avales), porque el proceso ya
está viciado, porque la Sra. Quiroga tiene ya mucha ventaja. Debe ser ahora,
porque es la hora de los afiliados.